La Federación de Rusia inició oficialmente su presidencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas este 1 de octubre, según el sistema de rotación mensual establecido por el organismo internacional. El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, será el encargado de dirigir las sesiones y establecer la agenda de trabajo durante este período.
El país euroasiático releva en esta responsabilidad a Corea del Sur, quien ejerció la presidencia durante el mes de septiembre, y será posteriormente reemplazado por Sierra Leona en noviembre. Este mecanismo de rotación sigue estrictamente el orden alfabético del nombre en inglés de los quince países que conforman el Consejo de Seguridad, garantizando una distribución equitativa de la presidencia.
La última ocasión en que Moscú ocupó la presidencia del máximo órgano de seguridad de la ONU fue en julio del año pasado, cumpliendo con el ciclo establecido de alternancia mensual. El Consejo de Seguridad está integrado por quince miembros, de los cuales cinco son permanentes -entre ellos Rusia- y diez son no permanentes elegidos por períodos de dos años.
Como parte de su agenda programática, Rusia tiene previsto convocar una reunión extraordinaria con motivo del aniversario de la entrada en vigor de la Carta de las Naciones Unidas, que se conmemora cada 24 de octubre desde 1945. Este encuentro especial buscará analizar y debatir el estado de aplicación de los principios fundacionales que dieron origen a la organización mundial.
La presidencia rusa se enmarca en un contexto internacional caracterizado por múltiples desafíos geopolíticos que requerirán la atención del Consejo de Seguridad. La experiencia diplomática de Vasili Nebenzia, como representante permanente ante la ONU desde 2017, será fundamental para conducir las deliberaciones sobre los temas críticos de la agenda internacional.
El sistema de rotación de la presidencia refleja el principio de igualdad soberana entre los estados miembros del Consejo de Seguridad, permitiendo que cada nación, independientemente de su tamaño o influencia, tenga la oportunidad de dirigir temporalmente los trabajos del órgano encargado de mantener la paz y seguridad internacionales.
El ejercicio de la presidencia por parte de Rusia durante octubre representa una oportunidad para impulsar iniciativas diplomáticas y promover el diálogo multilateral en el tratamiento de los conflictos internacionales, en consonancia con los propósitos y principios establecidos en la Carta de las Naciones Unidas.
T/RNV