El vicepresidente sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, desmontó la versión ofrecida por el mandatario colombiano Iván Duque sobre la captura de cuatro venezolanos que supuestamente estaban involucrados en actividades de desestabilización contra el gobinero neogranadino, con el respaldo del mandatario venezolano, Nicolás Maduro.
En rueda de prensa, se refirió a los cuatro detenidos que estuvieron implicados en la Operación Gedeón el pasado de mayo que buscaba el derrocamiento del Gobierno de Venezuela, así como el asesinato del presidente de la República, Nicolás Maduro, y de otros altos dirigentes. También participaron en el intento de magnicidio del 4 de agosto en la avenida Bolívar de Caracas.
Los cuatro capturados en suelo colombiano fueron identificados como Yacsi Alexandra Álvarez Mirabal, Rayder Alexander Russo y los hermanos Juvenal y Juven Sequea Torres.
Sobre Yacsi Alexandra Álvarez Mirabal, el vicepresidente Rodríguez reveló que fue la responsable de la logística para que ingresaran a Colombia dos estadounidenses implicados en la Operación Gedeón, Airan Seth Berry y Luke Alexander Denman.
Asimismo, esta ciudadana adquirió en junio de 2019 la empresa de seguridad norteamericana Silvercorp, según consta en la Notaría 3 del Circuito de Barranquilla. Esta empresa firmó un contrato con el diputado opositor Juan Guaidó para el asesinato del presidente de la República, Nicolás Maduro; del presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, y de miembros del alto mando militar de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb).
Once meses más tarde de esta compra, se desplegó la Operación Gedeón en las costas venezolanas.
A su vez, Russo está solicitado desde el 5 de agosto de 2018 por ser planificador y financista del intento de magnicidio contra el Presidente Maduro realizado con drones en la avenida Bolívar de Caracas, mientras que los hermanos Sequea fueron partícipes del golpe de Estado del 30 de abril de 2019.
Rodríguez recordó que el Gobierno de Venezuela ha denunciado el entrenamiento de paramilitares en campamentos colombianos, desde el año 2017.
T/AVN