Las delegaciones del Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) se reunieron este lunes con representantes de las comunidades indígenas, afrocolombianas, negras, raizales y palenqueras, con la intención de incluir sus derechos en el acuerdo de paz.
A través de un comunicado conjunto, se enfatizó: «La paz territorial sólo será posible, en más del 30 por ciento del territorio rural del país, si se incluyen los grupos étnicos que lo habitan, la riqueza de su experiencia en la construcción de paz, y el valor de sus derechos como mecanismos de prevención de nuevos conflictos en la implementación de los acuerdos».
Asimismo, las delegaciones reiteraron su compromiso con el respeto y la protección de la diversidad étnica y cultural de todas las comunidades que habitan en la nación suramericana.
Las conversaciones, que se llevaron a cabo en La Habana, capital de Cuba, se enmarcan en el punto seis de la Agenda del Acuerdo General que establece la «implementación, verificación y refrendación».
En contexto
El 23 de junio las delegaciones de paz del Gobierno y de la FARC-EP anunciaron desde Cuba que llegaron a un acuerdo sobre el cese al fuego bilateral y definitivo, el desarme de la insurgencia y las garantías de seguridad, un paso que no es final para llegar a la paz, pero sí uno de los más importantes para alcanzarla.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, señaló la semana pasada que era posible tener un acuerdo definitivo el próximo 20 de julio, fiesta patria en la nación neogranadina.
Cifras oficiales estiman que el conflicto armado en Colombia ha provocado unos 260 mil muertos, 45 mil desaparecidos y 6,9 millones de desplazados.
T/teleSUR