El Gobierno de la Federación de Rusia emitió un enérgico llamado a la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, para que evite cometer lo que calificó como un «error fatal» en su política hacia Venezuela. La advertencia fue formulada mediante un comunicado oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, divulgado este jueves, el cual alerta sobre una escalada deliberada de tensiones que pone en riesgo la estabilidad regional y la navegación marítima internacional.

En el documento diplomático, la Cancillería rusa manifestó su preocupación por la situación. «Constatamos una escalada ininterrumpida y deliberada de la tensión en torno a Venezuela, país amigo para nosotros», expresó el texto. El Ministerio añadió que las decisiones unilaterales adoptadas por Washington generan una amenaza directa para el tráfico marítimo global y el comercio de hidrocarburos.

Posteriormente, el comunicado instó a la Casa Blanca a no persistir en un curso de acción cuyas consecuencias podrían ser impredecibles para todo el Hemisferio Occidental. Al mismo tiempo, Moscú exhortó a evitar un enfoque ideológico que distorsiona la comprensión de la realidad latinoamericana y caribeña, reafirmando el derecho de cada pueblo a la autodeterminación sin injerencias externas.

La posición rusa reiteró, de manera consecuente, la necesidad de una normalización del diálogo entre Estados Unidos y Venezuela. La única vía responsable, subrayó el Ministerio, es la desescalada inmediata, el estricto respeto al derecho internacional y la búsqueda de soluciones constructivas a las divergencias. «América Latina y el Caribe deben seguir siendo una zona de paz», enfatizó la declaración.

Paralelamente, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ofreció declaraciones complementarias que reforzaron el mensaje oficial. Peskov advirtió sobre el carácter potencialmente peligroso de la creciente tensión, recordando que Venezuela es un aliado y socio estratégico de Moscú con contactos constantes al más alto nivel, incluida una reciente comunicación telefónica entre los presidentes Vladímir Putin y Nicolás Maduro.

El pronunciamiento ruso se contextualiza en una serie de acciones estadounidenses recientes, las cuales incluyen la orden de un «bloqueo total» a petroleros, la designación del Gobierno venezolano como organización terrorista y operaciones militares en aguas del Pacífico. Rusia reafirmó su solidaridad con el pueblo venezolano y su apoyo a la línea del Gobierno del presidente Maduro, orientada a defender la soberanía nacional.

Finalmente, el portavoz Peskov hizo un llamado general a la cordura internacional. «Hacemos un llamamiento a todos los países a actuar con moderación para evitar una evolución impredecible de la situación», afirmó, reflejando la inquietud del Kremlin ante la posibilidad de una escalada militar de amplio impacto en la región.

T/RNV