El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció durante su programa Con Maduro + que en los próximos días se recibirá oficialmente de la UNESCO el Certificado de Inscripción del Joropo venezolano y su diversidad en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Dicho certificado será entregado simbólicamente a los cultores de más de 16 estilos de joropo que danzan y cantan a lo largo y ancho del país.
“A joropopear se ha dicho. En estos días vamos a recibir el Certificado (…) y se lo vamos a entregar a los joroperos”, expresó el Jefe de Estado, quien recordó que el reconocimiento fue otorgado el pasado 9 de diciembre durante la 20° sesión del Comité Intergubernamental en Nueva Delhi, India. El mandatario resaltó que esta postulación puso en valor la rica coexistencia de las diferentes variaciones de esta manifestación cultural, que integra danza, canto y música.
Un puente cultural con Colombia
En un gesto que reafirma el carácter compartido de la tradición llanera, el Presidente Maduro instruyó al Ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, a extender una invitación oficial a los cultores del Joropo en Colombia, en particular de la región de Casanare.
“Le dije al ministro Ernesto Villegas que invite a nuestros hermanos joroperos y joroperas de Colombia, de Casanare, que vengan a bailar joropo para acá”, afirmó. Esta convocatoria busca transformar la entrega del certificado en un encuentro de hermandad binacional, demostrando que el joropo es un puente cultural y un logro que enaltece a toda la región llanera compartida por ambos países.
Un reconocimiento a una tradición viva
El Joropo, reconocido por la UNESCO como una “tradición festiva viva que surge del encuentro entre diversas poblaciones”, combina poesía, canto y danza, y emplea instrumentos como el arpa, el cuatro, las maracas, el violín y el acordeón. Su inscripción como Patrimonio de la Humanidad celebra no solo su valor artístico, sino su rol como elemento de identidad y cohesión social para las comunidades venezolanas y colombianas.
La próxima ceremonia de entrega del certificado se plantea, por tanto, como un acto de reivindicación cultural y de integración, honrando a los portadores de esta tradición y subrayando su dimensión como patrimonio común.
T/RNV
