El primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, afirmó que América Latina y el Caribe deben unirse para fortalecerse mutuamente, resaltando el papel clave de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-TCP) en un contexto de nuevas presiones de Estados Unidos hacia Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Durante la XIII Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP, celebrada de manera virtual desde Caracas bajo la presidencia de Nicolás Maduro, Gonsalves enfatizó que la coexistencia entre naciones soberanas y EE.UU. está marcada por tensiones externas que amenazan la autodeterminación de los pueblos. Instó a los países a desarrollar estrategias conjuntas de cooperación basadas en la solidaridad para proteger sus intereses fundamentales.
Además, hizo un llamado a las naciones afectadas por las acciones estadounidenses a buscar soluciones pacíficas, subrayando que las políticas coercitivas de Washington contra Cuba, Venezuela y Nicaragua violan el derecho internacional. Gonsalves reiteró que América Latina es una región de paz y urgió a llevar este mensaje a las Naciones Unidas, denunciando los ataques contra la soberanía de estos países.
Criticó que EE.UU. priorice intereses particulares sobre el respeto a la autodeterminación y convocó a la unidad regional para defender la libertad de las naciones, advirtiendo que, sin solidaridad, las injerencias externas persistirán.
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