En el marco de la XIII Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció las acciones agresivas de Estados Unidos contra naciones soberanas de la región. Durante su intervención, advirtió sobre los intentos de revivir la Doctrina Monroe, una política que atenta contra la independencia de los Estados latinoamericanos y caribeños.
Criticó el envío de tropas estadounidenses al Caribe, bajo el pretexto de combatir el narcotráfico, señalando que EE. UU. es, paradójicamente, el mayor consumidor mundial de drogas. Asimismo, rechazó la campaña de desinformación contra Venezuela y su presidente, Nicolás Maduro, a quien se busca vincular con grupos criminales como parte de una estrategia de dominación.
Díaz-Canel llamó a los miembros del ALBA-TCP a reforzar la unidad regional, destacando que la batalla no solo es política y económica, sino también cultural y moral. Subrayó la importancia de la resistencia pacífica para preservar la soberanía, en línea con el legado de los próceres independentistas.
Además, condenó el genocidio en Gaza y exigió el fin de la impunidad del sionismo y la complicidad de las potencias imperiales. “Los crímenes persisten por la complicidad que los respalda”, afirmó.
Para concluir, elogió el papel del ALBA-TCP en la defensa frente a las amenazas externas y reafirmó que la integración regional es la mejor herramienta para contrarrestar la injerencia estadounidense.
T/RNV