El vicepresidente Sectorial de Seguridad Ciudadana, Política y Paz, Diosdado Cabello Rondón, ratificó que la política antidrogas de Venezuela ha ganado eficacia desde que el país decidió romper la cooperación con la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, organismo que calificó como «el mayor cartel del mundo».
En declaraciones recientes, Cabello denunció que la DEA utilizaba su presencia en el país para facilitar el narcotráfico bajo el pretexto de operativos antidrogas. «Con la salida de la DEA, Venezuela se liberó de ese mecanismo de ‘entradas controladas’ que solo servían para legalizar el tráfico de drogas», afirmó.
Esta postura fue heredada del Comandante Hugo Chávez, quien en su momento expuso que la agencia estadounidense actuaba bajo una doble moral: «Denunciamos que usaban la lucha antidrogas como fachada para encubrir y hasta promover el narcotráfico», recordó Cabello.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro reiteró el compromiso del Estado venezolano en la batalla contra los delitos transnacionales: «Venezuela es una nación soberana, democrática y en pie de guerra permanente contra el crimen organizado, especialmente contra el flagelo del narcotráfico».
Estas acciones no solo consolidan la política de seguridad nacional, sino que reafirman la independencia del Gobierno Bolivariano frente a injerencias extranjeras, fortaleciendo así su modelo de autodeterminación en la lucha por la paz y la justicia social.