La Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Fatsa) convocó a una huelga parcial desde este miércoles. Cerca de 300 mil trabajadores de todo el país participarán en el paro, que se llevará a cabo de forma escalonada hasta el viernes.
El gremio de la salud ha luchado durante meses por mejoras salariales, en medio de la pérdida del poder adquisitivo y la negativa de los empresarios a otorgar aumentos. En un comunicado, la Fatsa responsabiliza a los empresarios del sector de la salud por los problemas que puedan surgir en la atención de los pacientes durante estas jornadas de huelga.
Los trabajadores de la salud se sienten desatendidos y subestimados. “Somos un sector esencial que nuclea a más de 300 mil trabajadores en todo el país. Tenemos un equipo altamente profesionalizado, conformado por trabajadores con estudios terciarios y universitarios, pero sin ningún tipo de reconocimiento por parte de los empresarios”, expresaron durante la convocatoria.
El Consejo Directivo de la Fatsa, envió un contundente mensaje: “Los empresarios deben asumir su responsabilidad y pagar salarios acordes a la importancia de la tarea que desempeñamos. No toleraremos salarios congelados y sin aumentos desde marzo”. Además, anunciaron el inicio de un plan de lucha para enfrentar la intransigencia empresarial.
En un contexto económico preocupante, la inflación en Argentina alcanzó un alarmante 289.4% anual en abril. Los salarios continúan muy por debajo de las necesidades de los trabajadores, y el sector de la salud enfrenta una crisis de financiamiento. La presión sobre el sistema de salud se ha vuelto insostenible, y los profesionales exigen soluciones concretas.
T/VTV