El presidente de Francia, Emmanuel Macron, decretó estado de emergencia en Nueva Caledonia, tras los recientes disturbios que sacudieron el archipiélago del Pacífico, decisión que llega después de enfrentamientos que resultaron en la pérdida de cuatro vidas, que incluye un oficial de la gendarmería, además de numerosos heridos.
En este sentido, la chispa que encendió las llamas de la discordia fue la aprobación preliminar por parte de la Asamblea Nacional de Francia de una enmienda constitucional. Esta reforma propone extender el derecho al sufragio a residentes con más de una década en el archipiélago, una medida que ha generado consternación entre la comunidad indígena, quienes argumentan que esto podría menoscabar su influencia electoral.
El epicentro de la conmoción, Numea, la capital de neocaledonia, se vio sumergida en el caos, con vehículos y estructuras consumidos por el fuego. Entre los daños reportados se encuentra una conocida tienda de artículos deportivos, un destacado estadio y el aeropuerto internacional principal ha suspendido operaciones comerciales, hecho que contribuye al aislamiento de la región.
El ministro del Interior del país europeo, Gérald Darmanin, informó que cientos han resultado heridos, lo que incluye a más de cien efectivos de seguridad, este estado de emergencia busca restablecer el orden y garantizar la seguridad de los ciudadanos, mientras las autoridades trabajan para atender las causas subyacentes de la agitación social y buscar una resolución pacífica al conflicto.
T/Sputnik