Tras las elecciones en Chile en la que resultó ganador José Antonio Kast, quien defiende medidas inspiradas en el supremacismo estadounidense, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, se dirigió directamente a la comunidad venezolana migrante en ese país. En su programa «Con Maduro+», número 99, el Mandatario recomendó, a los compatriotas, con humildad: «vuelvan a la patria. Esta es la patria de las oportunidades y de la felicidad perpetua».
El Jefe de Estado venezolano advirtió al presidente electo chileno sobre el trato a los venezolanos. Dirigiéndose a Kast, afirmó: «Usted podrá ser pinochetista convicto y confeso, pero cuidadito, le toca un pelo a un venezolano. Los venezolanos se respetan». El presidente venezolano fue contundente: «el que se mete con Venezuela se seca».
El Dignatario nacional destacó el valor de la migración venezolana en Chile, describiéndola como «gente de bien, que trabaja en Chile, que produce en Chile, que aporta a Chile». Expresó su preocupación ante posibles amenazas de expulsión y subrayó que «la migración venezolana tiene derechos y la constitución chilena se los debe garantizar».
Como medida de protección, el líder bolivariano instruyó a la vicepresidenta Ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez, y a la presidenta de la Gran Misión Vuelta a la Patria, Camila Fabri, elaborar un plan especial de apoyo jurídico, diplomático y logístico, para toda la comunidad venezolana en territorio chileno.
En este sentido, el presidente Maduro se refirió al desafío político que enfrenta Chile, describiendo a su pueblo como «noble, progresista, es un pueblo hermoso». A tales efectos, señaló: «va a tener a un presidente nazi pinochetista», pero aclaró que «son asuntos internos de Chile» en los que Venezuela no se inmiscuye.
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