Henderson Álvarez dejó una buena impresión en su primera apertura en las Mayores en dos años. El derecho encajó la derrota de los Filis de Filadelfia, 6-3, contra los Atléticos de Oakland, en el Citizens Bank Park el domingo por la tarde, pero dio un paso enorme después de dos operaciones en el hombro, la más reciente en septiembre de 2016.
Álvarez tiró cinco entradas y se fue del partido con su equipo arriba 3-2, después de dar un boleto y recibir un sencillo, en el inicio del sexto. Terminó cargando con cinco imparables y cuatro carreras, en tanto que concedía dos boletos y ponchaba a cuatro.
“Fue la primera vez después de tanto tiempo y gracias a Dios me sentí bastante bien. El control de los pitcheos estuvo bien. Estoy contento, feliz de volver a estar en Grandes Ligas”, declaró el derecho a BHSC Latinoamérica.
El valenciano mostró una recta que llegó a ser cronometrada en 93 millas por hora y lució cómodo mientras retiraba a los primeros cinco bateadores a los que se enfrentó. El primer hit que permitió fue un doble de Marcus Semien, con dos outs, en el tercero.
Chad Pinder pescó una curva que Álvarez dejó colgada en el medio del plato para iniciar el cuarto capítulo con un jonrón y Matt Olson lo imitó con otro estacazo de vuelta completa ante una recta de 91 mph para igualar el partido 2-2. El resto de las anotaciones que fueron a la cuenta de Álvarez se produjeron después que el criollo había abandonado el montículo.
“Le doy las gracias a los Filis por abrirme las puertas para demostrar que el brazo ha vuelto y tiene la fuerza necesaria”, destacó Álvarez. ´”He trabajado fuerte para seguir adelante y no volver a caer en lesiones”.
El criollo se convirtió en el lanzador número 31 que usan los Filis esta temporada, lo que dejó en el olvido la marca de 30 tiradores que impuso el equipo en 2015. Algo que jugará a favor del derecho, si termina bien. Con Aaron Nola como el único abridor con un lugar asegurado en la rotación, Álvarez agregó su nombre al de Nick Pivetta, Jake Thompson, Mark Leiter Jr. y Ben Lively, entre los candidatos a unirse a Nola en 2018.
“Me gusto Álvarez”, señaló el manager Pete Mackanin a MLB.com. “Me gustó el movimiento de sus pitcheos. Por lo que he visto, tiene mucha confianza. Cometió un par de errores, pero en general, se vio muy bien”.
Luego de un largo proceso de recuperación, Álvarez se exhibió ante scouts de unas 15 organizaciones en julio, pero antes de recibir ofertas concretas, tuvo que ir a la Liga del Atlántico y fraguar su regreso con el Long Island.
“Esa liga independiente es competitiva, de allí salen varios peloteros pueden conseguir trabajo. Long Island me dio la oportunidad para que muchos equipos me vieran y los Filis me chequearon en cada salida y me extendieron un contrato para Triple A, por los días que restaban de la temporada. Tiré tres juegos en la ronda regular y uno en los playoffs”, recordó Álvarez. “Al finalizar mi último trabajo, el pitching coach (David Lundquist) me dijo que tenía que hablar conmigo y me informó que iba a lanzar en Grandes Ligas. Así que después de estar aquí, después de tanto esfuerzo y tanta lucha, ahora el objetivo es mantenerme saludable para estar mucho tiempo en las Mayores”.
Álvarez proyecta abrir un par de partidos más antes que concluya la ronda regular.
T/RNV/Prensa LVBP