Más de dos mil novecientos hombres y mujeres a caballo protagonizaron la celebración del Día de la Llaneridad en el municipio Páez del estado Apure. El evento, realizado en la parroquia Guasdualito, rindió homenaje a la identidad, cultura e historia de la región llanera venezolana.
El gobernador de Apure, Wilmer Rodríguez, destacó el significado profundo de esta tradición. Afirmó que la festividad honra «nuestras raíces y nuestra historia, una historia que se consolidó a caballo en las lanzas y espadas de nuestros Libertadores», conectando el presente con el legado independentista.
Desde la llanura apureña, Rodríguez exaltó el espíritu de los «Bravos de Apure», a quienes describió como herederos de la estirpe y valentía de los ancestros. Subrayó su compromiso con «defender nuestra patria sagrada, preservar lo nuestro y mantener viva la esencia de lo que somos» como pueblo.
La autoridad regional destacó el orgullo de los «llaneros de sombrero y alpargata» por su gentilicio y por la historia que los forjó como comunidad libre, independiente y soberana. Este sentimiento de pertenencia fue el eje central de la masiva celebración ecuestre.
María José Ramírez, directora de turismo estatal, resaltó el impacto económico y cultural de estas fiestas. Explicó que eventos de esta magnitud impulsan el turismo, potenciando hoteles, gastronomía y sitios emblemáticos, proyectando la riqueza llanera a niveles regional, nacional e internacional.
La celebración consolidó así su doble función: preservar las tradiciones culturales mientras genera desarrollo turístico. Cabalgatas de esta envergadura reafirman la vitalidad del folclor llanero y su capacidad para dinamizar la economía local desde la autenticidad cultural.
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