El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, lideró la conmemoración del Bicentenario del Decreto de Chuquisaca, al cual calificó como el primer mandato ambientalista y ecologista del Libertador Simón Bolívar. Durante el acto, el Jefe de Estado subrayó la vigencia de aquel documento como legado fundamental para la construcción ecológica de la nación en el siglo XXI.
El Presidente Nicolás Maduro recordó la figura de Bolívar más allá de sus proezas militares, describiéndolo como el fundador de un cambio civilizatorio orientado al futuro. “Bolívar no fue solo aquel hombre de grandes hazañas militares, fue además el fundador genuino de un verdadero cambio civilizatorio apuntado al futuro”, expresó, enfatizando la profundidad filosófica y espiritual de su obra revolucionaria.
En relación con esto, destacó que el Libertador fue pionero en firmar disposiciones que reconocían los derechos de los pueblos indígenas como ciudadanos. Medidas como la distribución de tierras, la creación de un sistema educativo para huérfanos y el censo de Chuquisaca constituyeron, de acuerdo con la explicación, un precedente histórico en materia de justicia social y organización institucional.
En consecuencia, el Jefe de Estado afirmó que el pueblo venezolano revolucionario es el heredero directo de esa tradición ambientalista, la cual sirve como escudo ante el imperialismo. “Somos herederos de una alternativa civilizatoria que está en pleno desarrollo, basada en la vida, el equilibrio y en la convivencia universal”, manifestó, estableciendo un vínculo directo entre el pensamiento de Bolívar y la política contemporánea.
Asimismo, trazó una comparación entre la época del Libertador y la actualidad, señalando una continuidad en la defensa de la tierra y las riquezas naturales. Señaló que en esa defensa radicó la primera idea socialista y revolucionaria, pues “el socialismo rechaza toda forma de guerra por tierra o recursos, porque se fundamenta en valores humanos”.
Finalmente, concluyó con una firme proclamación de soberanía. “No somos copia ni calco de nadie, tampoco esclavos ni colonia de ningún poder extranjero. Bolívar no se perdió, y el pueblo de Venezuela jamás entregará sus tierras”, aseguró, reafirmando a Bolívar como símbolo eterno de la independencia y la dignidad nacional.
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