El Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas expresó su profunda preocupación por la grave y sin precedentes escalada de acciones hostiles y declaraciones amenazantes del gobierno de Estados Unidos contra Venezuela. Consideran que estas acciones constituyen una peligrosa violación del derecho internacional y amenazan la estabilidad regional.
El grupo observó con extrema preocupación la declaración unilateral del presidente estadounidense del 29 de noviembre de 2025, que pretende imponer un cierre total del espacio aéreo venezolano. Esta medida, al carecer de autorización del Consejo de Seguridad de la ONU, fue calificada como una agresión flagrante contra la soberanía y un bloqueo aéreo de facto.
La declaración desafía abiertamente la Convención de Chicago sobre Aviación Civil Internacional y viola el principio fundamental de la Carta de la ONU que prohíbe la injerencia en los asuntos internos de los Estados (Artículo 2.1). El Grupo enfatizó que estas acciones representan un patrón preocupante de violaciones del derecho internacional.
Entre las acciones condenadas se incluyen masivas maniobras de aeronaves militares estadounidenses cerca del espacio aéreo venezolano, con incursiones no notificadas en la Región de Información de Vuelo de Maiquetía. También señalaron el aumento de interferencia electrónica, bloqueo de sistemas GPS y la ilegal designación de un supuesto «Cartel de los Soles» como organización terrorista.
El Grupo consideró especialmente grave las recientes declaraciones del presidente estadounidense anunciando posibles ataques «en tierra» dentro del territorio venezolano. Estas acciones colectivas representan una clara violación del Artículo 2.4 de la Carta de la ONU, que prohíbe expresamente la amenaza o uso de la fuerza en las relaciones internacionales.
La fabricación de narrativas falsas para justificar una agresión socava los pilares del sistema multilateral y pone en peligro la paz en una región proclamada como «Zona de Paz». El Grupo hizo un llamado urgente al gobierno estadounidense para que respete la soberanía venezolana, cese las amenazas de fuerza, retire sus activos militares y privilegie el diálogo diplomático.
El Grupo subrayó que la única vía para resolver diferencias entre Estados es el respeto al derecho internacional y a los principios de la Carta de las Naciones Unidas, instando a la comunidad internacional a actuar colectivamente para prevenir un conflicto basado en la coerción y el unilateralismo.



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