El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, envió este 9 de julio cartas oficiales a siete socios comerciales de menor tamaño con el anuncio de nuevos aranceles de importación. Los países sujetos a la primera tanda de medidas son Filipinas, Brunéi, Moldavia, Argelia, Libia, Irak y Sri Lanka.
De acuerdo con las cartas dirigidas a los líderes de estas naciones, que fueron publicadas en las redes sociales de la Casa Blanca, se impondrán aranceles del 30 % para Argelia, Irak, Sri Lanka y Libia, del 25 % para Moldavia y Brunéi, y del 20 % para Filipinas. «Lamentablemente, nuestra relación ha estado lejos de ser recíproca», reza cada una de las misivas.
El mandatario ya había ampliado la lista de países que deberán pagar tarifas adicionales. El lunes anunció que los productos provenientes de Japón y Corea del Sur estarán sujetos a tarifas del 25 %, mientras que los de Myanmar y Laos enfrentarán aranceles del 40 %. Los envíos desde Sudáfrica tendrán una tasa del 30 %, y los de Kazajistán y Malasia del 25 %.
Además, cumpliendo su promesa del martes de notificar a más países sobre la imposición de gravámenes, Trump publicó en su cuenta de Truth Social cartas dirigidas a los líderes de Túnez, Bosnia-Herzegovina, Indonesia, Bangladés, Serbia, Camboya y Tailandia, informándoles de las nuevas tarifas: Túnez 25 %, Bosnia-Herzegovina 30 %, Indonesia 32 %, Bangladés 35 %, Serbia 35 %, Camboya 36 % y Tailandia 36 %.
En las misivas, el mandatario explicó que la razón de los nuevos aranceles es el déficit comercial de EE.UU. con esas naciones. Añadió que estas medidas podrían evitarse si las empresas de los países afectados trasladan su producción a territorio estadounidense. También advirtió a estos países que no impongan aranceles de represalia, ya que, en ese caso, Washington aumentaría sus impuestos de forma proporcional.
La mayoría de los análisis económicos dicen que los aranceles empeorarán las presiones inflacionarias y restarán al crecimiento económico, pero Trump ha utilizado los impuestos «como una forma de afirmar el poder diplomático y financiero» de Estados Unidos tanto sobre rivales como aliados.
Su administración asegura que los impuestos a las importaciones reducirán los desequilibrios comerciales, compensarán parte del costo de los recortes de impuestos que firmó el viernes y harán que los empleos en fábricas regresen a Estados Unidos.
Trump impone aranceles del 50% a Brasil por juicio a Bolsonaro
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles la imposición de aranceles de hasta el 50% a las exportaciones brasileñas hacia EE.UU., en lo que parece ser una represalia por el proceso judicial que enfrenta el expresidente Jair Bolsonaro. La medida, que entrará en vigor el 1 de agosto de 2025, ha sido calificada como una injerencia en los asuntos internos de Brasil y ha generado una fuerte respuesta del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
En un comunicado publicado en su red social Truth, Trump justificó los aranceles alegando «ataques insidiosos» de Brasil contra las elecciones libres y la libertad de expresión. Además, criticó el juicio contra Bolsonaro, tildándolo de «cacería de brujas» y exigiendo su fin inmediato. El mandatario estadounidense también denunció una supuesta relación comercial «injusta» entre ambos países.
El presidente brasileño respondió con firmeza en X (antes Twitter), rechazando cualquier forma de tutelaje externo y defendiendo la soberanía de Brasil. Lula calificó de «falsas» las acusaciones de Trump sobre el déficit comercial, señalando que EE.UU. ha mantenido un superávit de 410.000 millones de dólares en los últimos 15 años en su intercambio con Brasil.
Lula advirtió que cualquier medida unilateral de EE.UU. será contestada bajo la ley brasileña de reciprocidad económica, subrayando que su gobierno no permitirá intromisiones en asuntos internos. «La soberanía y el respeto a los intereses del pueblo brasileño son prioritarios», afirmó.
T/RNV