Un proyecto basado en películas de quitosano, material biocompatible, se encuentra en su fase final para su aplicación como apósitos en pacientes con quemaduras. Este invento fue desarrollado por un equipo de la Fundación Instituto Zuliano de Investigaciones Tecnológicas (Inzit), quien obtuvo el material a partir de la quitina presente en los exoesqueletos de cangrejos.
En un paso crucial para la materialización de esta investigación, los doctores Adrián Chávez y Sabrina Acevedo, se reunieron con el médico Orlando Guijarro, quien lidera la Unidad de Atención Integral para el Paciente Quemado del Hospital Coromoto en Maracaibo, para coordinar las actividades que iniciarán las pruebas clínicas en pacientes de dicha unidad.
«La colaboración con el Hospital Coromoto es fundamental para validar la eficacia de nuestros apósitos de quitosano», afirmó el doctor Chávez, quien es el investigador principal del proyecto, además de manifestar su entusiasmo con el potencial de este material, para mejorar la calidad de vida de las personas que sufrieron heridas térmicas.
La Fundación Inzit suministrará las películas estériles de quitosano, elaboradas en sus propios laboratorios, a la unidad de pacientes quemados del Hospital Coromoto. De esta manera, el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), a través de sus entes adscritos, desarrolla soluciones innovadoras que contribuyen al bienestar del pueblo venezolano.
T/Mincyt