Josep Borrell admitió que usaron Fondo Europeo para la Paz en el envío de armas de guerra a Ucrania

Aunque los acuerdos fundacionales de la Unión Europea (UE) prohíben el uso del presupuesto comunitario para la compra de armas, sus directivos “rompieron su propio tabú” creando un procedimiento para superar esos límites legales y financiar los suministros armamentísticos a Ucrania, afirmó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.

En declaraciones a The Financial Times, el jefe de la diplomacia europea recordó que, a los tres días de iniciarse la operación rusa, preguntó a los cancilleres de los 27 Estados miembros sobre la idea de empezar a comprar armas para Ucrania, y su planteamiento fue recibido “con incredulidad».

El silencio fue la respuesta inmediata a su propuesta para usar el Fondo Europeo para la Paz, pero Borrell asegura que ya sabía que aquello era un punto de inflexión, porque “el tabú fue roto”.

El fondo fue creado en marzo de 2021 con cinco mil 600 millones de euros (cinco mil 900 millones de dólares), con objetivos declarados para “mantener la paz, prevenir conflictos y fortalecer la seguridad y estabilidad”. Con este propósito, solo se podía proporcionar “equipos no letales” a terceros países que necesitaran apoyo solamente en materia de seguridad ciudadana.

Otra de las objeciones a la propuesta de Borrell fue que la ayuda militar a Ucrania sería una contradicción a los documentos constituyentes de la UE, que cuenta con tres miembros que son constitucionalmente neutrales.

Pero el alto funcionario europeo argumentó que el fondo no es parte del presupuesto comunitario y, por lo tanto, se encuentra fuera de las competencias legales de los tratados, al tiempo que el Parlamento Europeo tampoco ejerce facultades sobre dichos activos.

Al día siguiente a esa reunión, la ayuda que se aprobó sumaría, según el referido medio, al menos 325 carros de combate, 36 helicópteros de ataque, más de 200 lanzacohetes múltiples y cerca de mil drones, además de municiones. La asistencia otorgada a Kiev desde el Fondo se evalúa en tres mil 100 millones de euros.

Rusia, por su parte, envió notas de protesta a todos los Estados que suministraban armas a Ucrania. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, advirtió que cualquier cargamento con armas para Kiev se convertirá en un blanco legítimo para las Fuerzas Armadas rusas.

Asimismo, advirtió que los suministros de armamentos de Occidente a Ucrania no cambiarán la situación en el campo de batalla, sino que solo prolongarán el sufrimiento del pueblo ucraniano.

T/Agencias/VTV