A casi un año del golpe de Estado que acabó con el mandato de Evo Morales, más de 7,3 millones de personas acuden este domingo a las urnas en las elecciones generales de Bolivia para decidir el destino del país.
En medio de altas tensiones por el despliegue de más de 23 mil policías y militares en toda la nación y la supresión a última hora del conteo rápido de los votos, la nación andino amazónica deberá elegir entre cinco candidatos presidenciales.
Los aspirantes que pugnan por la silla presidencial son Luis Arce, del Movimiento al Socialismo, Carlos Mesa (Comunidad Ciudadana), Luis Fernando Camacho (alianza Creemos), Chi Hyun Chung (Frente para la Victoria) y Feliciano Mamani (Partido de Acción Nacional Boliviano).
Para ganar en primera vuelta, la persona elegida deberá alcanzar más de 50% de los votos, o al menos 40% de las papeletas con una diferencia de 10 puntos sobre el ocupante del segundo lugar, según las normas del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Desde Argentina, donde se encuentra refugiado tras el golpe de Estado de noviembre de 2019, Morales advirtió sobre las intenciones desestabilizadoras del gobierno de facto encabezado por Jeanine Áñez con el hostigamiento hacia ciertos grupos de veedores internacionales.
Los bolivianos por el mundo ya ejercen su derecho al voto e incluso en Asia, por la diferencia horaria, ya se cerraron las mesas de votación.
El TSE, en su cuenta de Twitter, publicó imágenes de los colegios electorales en Corea del Sur, China, Japón, India, Rusia, España, Francia, Bélgica, Egipto, Suiza y Alemania.
Según los datos del padrón electoral de 2020, un total de 301 mil 631 bolivianos en el exterior podrán ejercer su derecho al voto, mientras siete millones 31 mil 294 lo harán en territorio nacional.
Además del presidente y el vicepresidente, el pueblo boliviano votará para escoger a 36 senadores, 130 diputados y nueve representantes supraestatales.
T/AVN
