El presidente de la República, Nicolás Maduro, anunció la captura de Francis Margarita Aguilar Salazar, mujer involucrada en el contrabando de medicinas contra el COVID-19, en Valencia, estado Carabobo.
La detención se genera tras la investigación que lleva a cabo la Fiscalía General de la República, que imputó a un médico de nacionalidad colombiana -Antonio José Amell Cantillo- quien se dedicaba a la venta ilícita de medicamentos suministrados por el Ministerio del Poder Popular para la Salud de manera gratuita para el tratamiento de la infección respiratoria.
A propósito el Jefe de Estado, presentó dos videos relacionados con el caso, donde se observaba a estos profesionales de la salud ofertando el medicamento Remdesivir, en un costo de 800 dólares.
La acción fue calificada por el Mandatario como una descomposición moral que atenta contra la vida de los venezolanos y venezolanas, por lo que pidió el apoyo para detectar a quienes intenten comercializar estos tratamientos.
«Quien esté contrabandeando y jugando con la vida del pueblo, hagánmelo saber para ir por ellos», enfatizó
Además denunció que la ultraderecha venezolana en conjunto con la oligarquía colombiana, impulsa una campaña en defensa de este médico alegando que el Gobierno venezolano lo tiene secuestrado, cuando ya se han mostrado diversas evidencias de su culpabilidad.
Respecto a esta investigación el Fiscal General de la República , Tarek William Saab, declaró el pasado miércoles que este médico residente de Medicina Interna en Valencia, Carabobo fue detenido «tras un trabajo de inteligencia» realizado por la Fiscalía, la Policía y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) como órganos auxiliares.
Según William Saab, denuncias por parte de familiares de pacientes motivaron a esta investigación, donde se conoció que ambos detenidos dirigían a las personas a comercios cercanos al Hospital, a los fines de que imprimieran las plantillas de ingreso a dicho centro hospitalario, para lo cual también debían pagar.
T/Prensa Presidencial