Padre Numa: Con el Papa Francisco la causa de José Gregorio Hernández tomó fuerza

 

El padre jesuita Numa Molina aseveró este sábado que la llegada al Vaticano del Papa Francisco hizo que la causa del doctor José Gregorio Hernández, y de otros santos de los pueblos del continente, tomaran la fuerza que necesitaban para lograr el reconocimiento ante la Iglesia Católica, mediante el decreto de su beatificación.

“Esa causa tomó fuerza con la llegada del Papa Francisco, no solo la causa de José Gregorio Hernández, sino también el expediente de monseñor Romero, el santo del pueblo de El Salvador”, explicó Molina durante un programa especial transmitido por VTV.

Desde ese espacio contó cómo la Causa del Siervo de Dios avanzó en los últimos años, en los que un cambio de postulador ante el Vaticano fue clave para investigar a profundidad los milagros concedidos.

La teóloga argentina Silvia Correale tomó las riendas de la causa, la misma que trabajó en la beatificación de la Madre María Carmen Rendiles, la tercera beata del país.

“Es una mujer que conoce a América Latina, como nosotros, como Francisco, y ella comienza con entusiasmo a revisar los expedientes y se dio cuenta que faltaban testimonios y documentos, que eran importantes para continuar”, aseveró Molina.

En el proceso en Venezuela, fue nombrado el párroco de La Candelaria, el padre Gerardino Barracchini, como encargado de la Causa de Los Santos de la Arquidiócesis, y es quien retoma el trabajo mientras que el pueblo seguía orando y aclamando la beatificación.

“El pueblo seguía pidiendo su beatificación y dentro de esas peticiones la del presidente Nicolás Maduro, cuando visitó al Papa el 17 de junio de 2013. Después de esta beatificación, José Gregorio Hernández sigue siendo el santo del pueblo y se ha hecho justicia a un clamor del pueblo”, manifestó el padre Numa.

De igual forma, el padre recordó una oportunidad en la que se reunió personalmente con el Santo Padre, en una audiencia privada el 14 de agosto de 2013, donde le conversó sobre El Venerable.

“No olvido nunca su gesto que dio con los dedos a la mesita de por medio y dijo: ‘Hombres como esos unen a los pueblos. Encargate de ver en qué estado va eso'”, refirió.

Petición de médico a médico

En el camino hacia la beatificación, el padre Molina, mencionó el milagro que concedió la beatificación a Hernández, de la niña Yaxuri Ortega, de 13 años de edad, nativa del estado Apure y quien en 2017 fue impactada por una herida de bala en el cerebro y cuya recuperación científicamente era imposible, pero mediante testimonios, pruebas médicas y teológicas se comprobó la intercesión.

Precisó que conoció al doctor Alexander Krinitzki, médico tratante de la niña Yaxury, y con quien acordó reunir los documentos que comprobaban la improbabilidad de recuperación científica y los testimonios de la mamá de la niña, la cual indicó que al entrar su hija a cirugía se la encomendó a José Gregorio.

Sin embargo, las pruebas de aquel hecho no aparecían y es en ese momento que el doctor Krinitzki  le pide a al Santo de los médicos, que le ayude a conseguir la tomografía de Yaxury.

“Mete tus manos por conseguir la tomografía y al rato mi esposa llega con la tomografía y dice que la tenían mis hijos de tres años jugando, que la consiguieron metida en una cajita especial, la metimos en la computadora y estaba como recién hecha”, contó Krinitzki en una llamada telefónica a VTV.

Ante el relato y testimonio real del médico que trató y no vio posibilidades de salvarse, el padre Molina enfatizó que no existe duda de que detrás de todo está Dios, uniendo a las personas para la causa de Hernández.

Finalmente, el servidor jesuita recalcó que este es un momento especial en el que el mundo debe seguir el modelo de salud de José Gregorio, que fue humanista y cristiano.

“Que su vida nos inspire para ser auténticos cristianos como él”, subrayó.

T/AVN