Pese a los continuos llamados por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para enfrentar al Covid-19, aún hoy no se aprecia suficiente solidaridad de los países en desarrollo para proporcionarle apoyo a los más necesitados, refiere Prensa Latina.
El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que en medio de la pandemia se puede apreciar enormes fragilidades ya existentes: en los sistemas de salud (débiles), el cambio climático fuera de control y niveles insostenibles de desigualdad.
«Vemos otros signos de esta fragilidad en todas partes, desde el creciente riesgo de proliferación nuclear hasta la ilegalidad del ciberespacio. Ignorar estas señales de advertencia es una arrogancia sin sentido. Las amenazas existenciales exigen humildad, unidad y solidaridad.»
Estas declaraciones las dio al finalizar el evento de alto nivel sobre financiamiento para el desarrollo en momentos de pandemia y más allá, en el cual participaron de forma virtual jefes de Estado y de Gobierno de 50 naciones.
A juicio del secretario general, este encuentro fue una reunión de solidaridad con muchos países en desarrollo, que enfrentan las consecuencias de esta enfermedad.
Guterres agregó que un grupo de trabajo considerará seis áreas de acción urgente y presentarán un informe en una reunión ministerial a fines de julio próximo.
«Todo lo que hacemos debe estar dirigido a permitir que los países en desarrollo luchen contra la pandemia», puntualizó.
Esta crisis recuerda que las cosas importantes en la vida requieren inversión: en las personas, en bienestar físico y mental, en la protección del ambiente y en la lucha contra las desigualdades, incluida la desigualdad de género, subrayó Guterres.
Hasta el momento, en el mundo se registran más de 350 mil fallecidos y 5.5 millones de personas contagiadas por el Covid-19.
T/AVN/Prensa Latina