El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, asiste este sábado a la Reunión Ministerial del Buró de Coordinación Movimiento de Países no Alineados (Mnoal), que se realiza desde Hotel Venetur Alba Caracas, en Caracas.
La actividad, que congrega a más de 110 estados miembros del Movimiento, se trata de una reunión preparatoria para la Cumbre de Bakú que se celebrará en octubre próximo y en la que Venezuela entregará la presidencia a Azerbaiyán.
Bajo el lema “Promoción y Consolidación de la Paz a través del Respeto al Derecho Internacional”, se desarrolla este foro en el que desde tempranas horas de la mañana distintos países han fijado posición sobre el respeto al derecho internacional y la autodeterminación de los pueblos.
En ese contexto, el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, repudió los constantes ataques que ejecuta el Gobierno de los Estados Unidos (EE.UU.) contra Cuba “a través del recrudecimiento del bloqueo”, lo que consideró como una violación al Derecho Internacional, al tiempo que denunció las sanciones unilaterales de las que son víctimas el Gobierno y el pueblo de Venezuela.
“La República Bolivariana de Venezuela continúa enfrentando una escalada de sanciones económicas y otros actos hostiles e ilegales que afectan el bienestar del pueblo venezolano”, acotó.
Asimismo, el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, indicó que la mayor responsabilidad y desafío del Movimiento es «defender la paz» y exhortó a los estados miembros a «disuadir a quienes nos la quieren arrebatar», al tiempo que aplaudió la consciencia política y valentía del pueblo venezolano frente a los contantes ataques.
«Para Venezuela nuestra solidaridad, amor, cariño, respeto, porque en medio del bloqueo y de las terribles sanciones a que han sometido al pueblo, este no pierde la moral ni la dignidad y no se rinde ni se vende», subrayó.
El Mnoal, conformada por 120 países, es una tribuna de concertación política que aboga por el fortalecimiento de la seguridad internacional, la autodeterminación de los pueblos y rechaza la injerencia. Este se configura como el segundo organismo más grande del mundo, después de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
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