El Día Mundial de las Aves Migratorias se celebra este fin de semana luego que en el año 2005 fuera declarada la fecha por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
La conmemoración se realiza con la finalidad de resaltar el valor de las aves en el equilibrio del ecosistema y su relación con el ser humano. También se busca crear conciencia sobre la importancia de proteger estas aves y sus hábitats.
En Venezuela, específicamente en el Monumento Natural Alejandro Humboldt y el Parque Nacional Cueva del Guácharo, ubicados en el estado Monagas, se puede observar al ave insigne del lugar, conocida como Guácharo, que efectúa una migración particular en busca de alimentos en meses que van de noviembre a marzo, refiere una nota de prensa del Ministerio para Ecosocialismo y Aguas.
Actualmente, gran cantidad de estas aves cambian su hábitat de la Cueva del Guácharo hacia las cuevas que se encuentran en la serranía de Mata de Mango desde donde realizan un vuelo de 240 kilómetros hacia el Delta del Orinoco en busca de la Palma Zea, recorrido que hacen en ocho horas.
Este proceso de migración de las aves es fundamental para la vida de las especies, puesto que actúan como indicadores de la salud del ecosistema, la diversidad biológica y el cambio climático.
De acuerdo con el Ministerio para Ecosocialismo y Aguas «se consideran aves migratorias a todas aquellas que viajan de un lado a otro dependiendo de la temporada del año. Usualmente, van de norte a sur o viceversa en busca de su mejor hábitat para vivir, con mejor clima o más alimentos disponibles».
Dichas aves migratorias proporcionan beneficios esenciales, como la polinización al ecosistema del que dependemos para sobrevivir.
La mayoría de estas aves se alimentan de insectos, semillas y frutas. En el caso de países donde ocurren las cuatro estaciones, durante el invierno todo su alimento se cubre de nieve o desaparece, motivo por el que las aves migran a otros lugares en busca de comida.
T/AVN
La conmemoración se realiza con la finalidad de resaltar el valor de las aves en el equilibrio del ecosistema y su relación con el ser humano. También se busca crear conciencia sobre la importancia de proteger estas aves y sus hábitats.
En Venezuela, específicamente en el Monumento Natural Alejandro Humboldt y el Parque Nacional Cueva del Guácharo, ubicados en el estado Monagas, se puede observar al ave insigne del lugar, conocida como Guácharo, que efectúa una migración particular en busca de alimentos en meses que van de noviembre a marzo, refiere una nota de prensa del Ministerio para Ecosocialismo y Aguas.
Actualmente, gran cantidad de estas aves cambian su hábitat de la Cueva del Guácharo hacia las cuevas que se encuentran en la serranía de Mata de Mango desde donde realizan un vuelo de 240 kilómetros hacia el Delta del Orinoco en busca de la Palma Zea, recorrido que hacen en ocho horas.
Este proceso de migración de las aves es fundamental para la vida de las especies, puesto que actúan como indicadores de la salud del ecosistema, la diversidad biológica y el cambio climático.
De acuerdo con el Ministerio para Ecosocialismo y Aguas «se consideran aves migratorias a todas aquellas que viajan de un lado a otro dependiendo de la temporada del año. Usualmente, van de norte a sur o viceversa en busca de su mejor hábitat para vivir, con mejor clima o más alimentos disponibles».
Dichas aves migratorias proporcionan beneficios esenciales, como la polinización al ecosistema del que dependemos para sobrevivir.
La mayoría de estas aves se alimentan de insectos, semillas y frutas. En el caso de países donde ocurren las cuatro estaciones, durante el invierno todo su alimento se cubre de nieve o desaparece, motivo por el que las aves migran a otros lugares en busca de comida.
T/AVN