El acuerdo fue pubricado por Daniel Gustafson, director general adjunto de Programas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el embajadorVíctor Vasiliev, representante permanente de la Federación ante ese organismo.
Se trata del primer proyecto de emergencia de la FAO financiado por la nación euroasiática. La contribución permitirá restablecer la capacidad de producción y mejorar la seguridad alimentaria y nutricional de 60 mil hogares vulnerables, unos 360 mil agricultores y pastores en el área de Alepo.
Para Gustafson, un importante número de agricultores abandonaron sus tierras en Siria por la inseguridad y el costo devastador de su producción agrícola, infraestructuras y servicios.
“Es nuestra prioridad impulsar la economía local y contribuir a reducir la pobreza y mejorar la nutrición de quienes más lo necesitan”, explicó.
Por su parte, Vasiliev señaló que el proyecto debe facilitar las condiciones para un desarrollo socioeconómico, al tiempo que expresó su deseo de que esa contribución: “traiga resultados concretos y tangibles en beneficio de la población más vulnerable”.
Expresó que espera ver “un papel más activo de otros donantes y organizaciones internacionales para ayudar al pueblo de Siria en su camino hacia la paz”.
Las FAO detalló que el proyecto de dos años está dirigido a reactivar la economía local, reducir la pobreza y mejorar la nutrición de grupos específicos, hacia lo cual se espera avanzar con el apoyo a los hogares más vulnerables a impulsar la producción hortícola, frutícola y forestal y a restaurar las infraestructuras para el riego.
Además, incluye brindar acceso a servicios veterinarios preventivos de brote y propagación de enfermedades contagiosas, así como mejorar la salud, producción y productividad del ganado, entre otros aspectos.
T/CORREO DEL ORINOCO