Este domingo 18 de noviembre se cumplen 14 años del asesinato del fiscal Danilo Anderson, quien encabezaba la investigación del golpe de Estado de abril de 2002 contra el presidente Hugo Chávez y el sabotaje petrolero de 2002-2003.
Anderson fue asesinado el 18 de noviembre de 2004 por una explosión. Al salir de clase de postgrado, el joven de 38 años subió a su camioneta a la que le habían colocado explosivos C-4.
El artefacto, presuntamente activado desde un teléfono celular, estaba ubicado debajo del vehículo y en el lado del conductor. El hecho se registró a las 9:35 de la noche en la urbanización Los Chaguaramos, Caracas.
Por la investigación que llevaba el fiscal sobre el golpe de Estado, habrían sido imputadas 400 personas, entre ellos dueños de medios de comunicación, que firmaron la autoproclamación del Gobierno ilegitimo de Pedro Carmona Estanga. Estas personas relacionadas con el golpe fueron llamadas a declarar por Anderson.
Luego del asesinato del abogado, las autoridades nacionales iniciaron una investigación de alto nivel que identificó a dos exagentes de policía estrechamente comprometidos con el complot homicida, Otoniel y Rolando Guevara, que fueron detenidos el 26 de noviembre de 2004 y acusados de homicidio calificado.
Asimismo, Juan Bautista Guevara—primo de Otoniel y Rolando Guevara—recibió la pena máxima de 30 años de presidio, después de comprobarse su responsabilidad como uno de los autores materiales de la muerte del fiscal Anderson.
También pesan órdenes de captura activas y alerta roja en la Policía Internacional contra Johann Peña y Pedro Lander, por la presunta comisión de los delitos de homicidio calificado en grado de autores materiales. Además, existe una orden de captura contra la periodista Patricia Poleo, por su presunta vinculación en este asesinato.
T/AVN