El ministro de Salud de Angola, Luis Gomes, informó este jueves que tras el brote de fiebre amarilla en esa nación se han producido 250 muertes de un total de mil 975 casos desde que se descubrió la enfermedad en diciembre.
El titular de la salud indicó que actualmente existen casos confirmados en 12 de las 18 provincias angoleñas, además, informó que han registrado personas sospechosas de contagio en las otras seis regiones.
El Gobierno de Angola, según el ministro, asumió el compromiso de financiar los costos de las vacunas que «permitieron inmunizar hasta la fecha seis millones de personas en Luanda, lo cual representa una cobertura de 91 por ciento».
Puso como ejemplo a la provincia de Huambo y de Benguela, en el primer caso están vacunadas 464 mil 300 personas y en la segunda 627 mil, precisó el funcionario.
«Hicimos diligencias para que el proceso de producción pueda ser acelerado», indicó Gomes.
Llamado de atención
Recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS), instó a fortalecer la calidad de la respuesta contra la epidemia de fiebre amarilla que flagela a Angola.
La OMS, en un comunicado consideró que el padecimiento puede ser una amenaza para el mundo y el riesgo mayor recae sobre países donde prolifera el mosquito transmisor Aedes aegypti, el mismo del dengue, chikungunya y zika.
Asimismo, indicó en el documento que es urgente fortalecer la calidad de la respuesta en el país, así como aumentar el control de inmunización de los viajeros oriundos de regiones afectadas por la enfermedad.
Datos
La fiebre amarilla es una dolencia viral transmitida por mosquitos infectados y provoca fiebre, dolores musculares, pérdida de apetito, vómitos y náuseas que pueden conducir a la muerte.
Se calcula que cada año se registran en el mundo 130 mil casos de ese padecimiento, que causan unas 44 mil muertes en países endémicos africanos, donde se notifica el 90 por ciento de las infecciones.
T/Telesur
