El PCI rechaza los intentos golpistas contra Maduro y se declara al lado del pueblo y el gobierno venezolano:
Y la historia se repite, siempre de la misma manera: en América Latina, mientras más fuerte es el cambio, un cambio del pueblo y para el pueblo, más decidida, feroz y sangrienta es la respuesta de las fuerzas de la reacción, impulsada y organizada por el imperialismo norteamericano. En este momento, en Caracas, un helicóptero robado a la policía venezolana atacó militarmente (disparando y lanzando granadas) tanto al Ministerio del Interior como al Tribunal Supremo.
No hay duda sobre la naturaleza política del ataque: en el helicóptero era visible una pancarta en la que se podía leer: “350 Libertad”, en referencia al artículo 350 de la Constitución Bolivariana que las fuerzas de la derecha venezolana y la Administración Trump utilizan de manera errónea y manipulada, con todas sus poderosas fuerzas, para lograr la caída de Maduro y de la revolución “chavista”.
El ataque de las fuerzas reaccionarias es, por ahora, la “punta del iceberg” del inmenso esfuerzo que están haciendo el gran capital venezolano, la oligarquía criolla y los propietarios de la tierra para traer de vuelta el orden neoliberal a Venezuela, volver a privatizar el petróleo y, en fin, izar de nuevo enCaracas la bandera norteamericana.
A partir de la primera victoria electoral de Hugo Chávez (1998) y a lo largo de los años de las otras victorias electorales “chavista” (2000, 2006, 2012) la ira de las fuerzas reaccionarias y de los EE.UU. nunca se ha aplacado, como nunca han abandonado la idea de implementar soluciones fascistas y “golpistas” contra la Revolución Bolivariana. La nacionalización del petróleo, la memorable campaña que acabó con el analfabetismo, la inversión social masiva -sobre todo en salud pública – y una política internacional totalmente auténtica y “chavista”, basada en el antiimperialismo y en la práctica de la solidaridad con los pueblos oprimidos y las luchas anti-coloniales, dentro de un proyecto de unidad e integración bolivariana para toda América Latina, ha hecho enloquecer a estas fuerzas de la reaccion tanto en Venezuela como en los EE.UU., que se han fijado como objetivo principal derrotar la Revolución y derrocar a Chávez antes y ahora a Maduro.
Ya en abril de 2002 el “golpe” estuvo muy cerca de la victoria, encarcelaron a Hugo Chávez, quien, en un hecho histórico inédito, fue liberado por el pueblo de los barrios caraqueños.
Ahora, aprovechando una crisis económica creada por ella misma, la derecha reaccionaria se desata, con el objetivo de dar el “golpe” final contra Maduro.
El Partido Comunista Italiano se alinea con toda su fuerza y sin duda alguna con el gobierno legítimo, popular, revolucionario, antiimperialista e internacionalista del camarada Maduro, recordando el inmenso papel que la Venezuela Bolivariana ya ha jugado y juega a favor de todos los pueblos y gobiernos antiimperialistas y anti neoliberales de América Latina. Y es a partir de esta toma de conciencia acerca del papel fundamental que Venezuela ha desarrollado en pro de la libertad de los pueblos Latinoamérica y el Caribe que el PCI considera y considerará la defensa, incluso por la fuerza, del gobierno revolucionario de Caracas, como un acto revolucionario legítimo.
T/PCI