Con pancartas y consignas, el pueblo de Portuguesa salió este jueves a las calles, en una marcha antiimperialista, para rechazar la extensión del decreto injerencista de Barack Obama y apoyar las políticas revolucionarias del presidente Nicolás Maduro.
La movilización, que contó con la participación de centenares de personas, estuvo encabezada por el gobernador Reinaldo Castañeda, quien durante su alocución aseguró que Venezuela es un país lleno de amor y de fuerza revolucionaria para la transformación de la Patria.
Por su parte, el luchador social Hilver León, en representación del poder popular organizado, manifestó que con esta gran movilización, que partió desde la plaza Bolívar de Araure hasta la plaza Bolívar de Acarigua del municipio Páez, el pueblo llanero se declara antiimperialista y ratifica una vez más el compromiso con el legado del comandante Chávez y con la revolución bolivariana.
La clase obrera también dijo presente en esta gran movilización, que reunió a frentes sociales, colectivos, juventud, estudiantes, madres, partidos políticos y autoridades gubernamentales.
Argenis Castañeda, presidente del sindicato de la construcción “Ali Primera”, manifestó que más de 300 trabajadores se sumaron a esta movilización para pedirle a Obama la derogación del decreto que señala al país como «una amenaza inusual y extraordinaria» para Estados Unidos.
Escuche el reporte Liliana Burgos
T/Prensa RNV Corresponsalía LB
La movilización, que contó con la participación de centenares de personas, estuvo encabezada por el gobernador Reinaldo Castañeda, quien durante su alocución aseguró que Venezuela es un país lleno de amor y de fuerza revolucionaria para la transformación de la Patria.
Por su parte, el luchador social Hilver León, en representación del poder popular organizado, manifestó que con esta gran movilización, que partió desde la plaza Bolívar de Araure hasta la plaza Bolívar de Acarigua del municipio Páez, el pueblo llanero se declara antiimperialista y ratifica una vez más el compromiso con el legado del comandante Chávez y con la revolución bolivariana.
La clase obrera también dijo presente en esta gran movilización, que reunió a frentes sociales, colectivos, juventud, estudiantes, madres, partidos políticos y autoridades gubernamentales.
Argenis Castañeda, presidente del sindicato de la construcción “Ali Primera”, manifestó que más de 300 trabajadores se sumaron a esta movilización para pedirle a Obama la derogación del decreto que señala al país como «una amenaza inusual y extraordinaria» para Estados Unidos.
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