Parlamento venezolano deroga Estatuto de Roma de la CPI en apoyo a Palestina

La Asamblea Nacional de Venezuela sancionó por unanimidad la Ley por Palestina y la Humanidad, que deroga el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI). Esta decisión histórica se tomó durante la sesión ordinaria del 11 de diciembre, marcando una posición firme del país en el escenario internacional.

La nueva ley representa una manifestación concreta de solidaridad del pueblo venezolano con el pueblo palestino. El instrumento legal pone de relieve el rechazo a lo que se describe como «el genocidio más crudo de la humanidad por parte del sionismo Israel», según el texto legislativo.El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, explicó que esta acción busca «denunciar ante el mundo, la inutilidad de una institución que debería servir para proteger a los pueblos». Rodríguez añadió que la CPI, en su perspectiva, «solo sirve para los designios del imperialismo norteamericano».

La ley derogatoria específicamente anula la Ley Aprobatoria del Estatuto de Roma de la CPI que había sido adoptada previamente. Con esta decisión, Venezuela formalmente retira su reconocimiento a la jurisdicción de esta corte internacional con sede en La Haya.

El instrumento legal ya fue remitido al presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, conforme a lo establecido en el artículo 213 de la Constitución nacional. Este procedimiento sigue el conducto regular para la promulgación de leyes en el ordenamiento jurídico venezolano.

Esta acción legislativa se enmarca en la política exterior venezolana de rechazo a lo que considera instrumentos de dominación imperialista y de apoyo a las causas de los pueblos que luchan contra la ocupación y la violación de sus derechos fundamentales.

La decisión parlamentaria representa un giro significativo en la relación de Venezuela con los mecanismos de justicia internacional, alineándose con su posición crítica hacia organizaciones multilaterales que considera sesgadas a favor de las potencias occidentales.

T/RNV