Dos pescadores trinitenses entre los últimos asesinados por EE. UU. en el Caribe

El reciente ataque militar de Estados Unidos (EE. UU.) a una embarcación en el Caribe, justificado bajo una presunta lucha antidrogas, dejó un saldo de seis personas fallecidas. Entre las víctimas se investiga la muerte de dos ciudadanos de Trinidad y Tobago, según informaron las autoridades policiales de ese país a la AFP. Este episodio forma parte del despliegue sin precedentes de buques militares estadounidenses cerca de las costas de Venezuela iniciado en agosto.

La investigación comenzó luego de que residentes de la aldea pesquera de Las Cuevas denunciaran la desaparición de dos pescadores que se encontraban a bordo de la lancha atacada. Familiares y vecinos exigen respuestas, afirmando que uno de los fallecidos, Chad Joseph, no era un traficante, sino un joven que simplemente intentaba regresar a su hogar. Su propio abuelo cuestiona ahora los métodos de la Administración Donald Trump.

Este evento marcó el quinto ataque perpetrado por Estados Unidos desde que envió sus tropas a la zona, habiendo adjudicado el primero para el 2 de septiembre con un saldo de 11 personas asesinadas. La estrategia militar estadounidense en la región ha resultado en la muerte de más de una veintena de personas, una situación calificada como preocupante por el integrante de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Jim Himes.

Desde el Congreso de EE. UU., Himes fue contundente al calificar estos operativos como «asesinatos ilegales». Enfatizó que la justificación de la administración Trump de estar en un «conflicto armado» con narcotraficantes es absurda y no se sostendría ante ningún tribunal, poniendo en evidencia la falta de un marco legal para estas acciones.

La situación ha generado una creciente tensión y demandas de claridad, mientras las llamadas de las familias y la prensa a las autoridades de Trinidad y Tobago continúan sin obtener una respuesta oficial. El caso de los dos pescadores trinitenses se ha convertido en un símbolo de las trágicas consecuencias humanas de una estrategia de seguridad desproporcionada y fuera de la ley.

T/RNV