La intervención del Embajador Samuel Moncada, Representante Permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, ha generado un significativo impacto en el ámbito geopolítico internacional. El discurso del diplomático venezolano reafirmó la posición soberana del país frente a las amenazas militares por parte del Gobierno de los Estados Unidos.
El profesor universitario Henry Navas analizó este momento como indicativo de una transformación global, señalando que «Venezuela asiste a un proceso donde hay un orden mundial en decadencia y otro que emerge». El académico destacó que la consolidación del nuevo orden multipolar ha forzado al imperialismo estadounidense a un repliegue significativo en sus acciones internacionales.
Navas resaltó la capacidad de resistencia del Estado venezolano y el liderazgo estratégico del Presidente Nicolás Maduro. El profesor universitario señaló que las acusaciones estadounidenses responden fundamentalmente al interés de controlar los recursos naturales de Venezuela, más allá de las narrativas sobre narcotráfico que han sido desmentidas por organismos internacionales.
El politólogo Walter Ortiz valoró la intervención de Moncada como una evidencia clara del cambio en el orden global. Ortiz enfatizó la solidez argumentativa del discurso venezolano y la falta de justificaciones válidas por parte de Estados Unidos para sus acciones contra Venezuela, destacando que esta posición ha generado fisuras incluso dentro de la política interna estadounidense.
La postura venezolana ha recibido un importante respaldo implícito de diversas naciones en el Consejo de Seguridad, incluyendo a Guyana, Rusia, China, Argelia, Francia y Reino Unido, que no avalaron la política estadounidense hacia Venezuela. Este respaldo diplomático representa un logro significativo para la estrategia internacional del país suramericano.
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