La Grita se convierte en galería a cielo abierto con «Ciudad Mural»

La capital del municipio Jáuregui, La Grita, se ha convertido en una impresionante galería a cielo abierto gracias a la XIV edición de «Ciudad Mural». Como parte de las celebraciones por sus 449 años, 40 artistas nacionales y dos provenientes de Colombia dejaron su huella en las paredes de la calle 2, transformando el espacio urbano en un vibrante escenario de arte y cultura.

Esta iniciativa, impulsada por la Vicepresidencia de Asuntos Religiosos del PSUV en colaboración con la alcaldía de Jáuregui y la gobernación del estado Táchira, dio vida a 15 murales que capturan la esencia de La Grita. Freddy Bernal, gobernador del estado, destacó la importancia de esta ciudad, conocida como la «Atenas del Táchira» por su riqueza cultural y artística. «Estos murales representan la idiosincrasia y los elementos autóctonos de nuestra montaña», afirmó.

Gerardo Duque, muralista tachirense, resaltó el impacto de «Ciudad Mural» en el sector turístico y en la promoción del arte local. «Este movimiento nos motiva a crear y a unirnos como artistas», expresó. Por su parte, Avilio Robles, proveniente de Trujillo, participó por segunda vez en el festival, plasmando en su obra figuras religiosas emblemáticas como José Gregorio Hernández y el Santo Cristo de La Grita.

Andrés Bello, artista merideño, destacó la variedad de estilos y temáticas presentes en los murales. «Aunque muchos abordaron el tema del Santo Cristo, cada uno lo hizo desde una perspectiva única, enriqueciendo el paisaje urbano», señaló. Este tipo de festivales no solo embellecen la ciudad, sino que también sirven como vitrina para que los creadores muestren su talento y establezcan conexiones con otros artistas.

Eloy Guzmán, muralista caraqueño, utilizó su obra para rescatar la memoria artesanal y agrícola de la región. «Mi mural incluye elementos como el trigo, el molino de piedra y la quesadilla, combinados con una estética fantástica para atraer a los más pequeños», explicó. Su propuesta demuestra cómo el arte puede ser una herramienta para preservar y difundir las tradiciones locales.

Con «Ciudad Mural», La Grita no solo celebra su aniversario, sino que también consolida su reputación como un referente cultural en Venezuela. Los murales, más allá de su valor estético, se convierten en un testimonio de la identidad y la creatividad de esta tierra de poetas, filósofos y artistas. El próximo año, cuando la ciudad cumpla 450 años, este legado artístico seguirá inspirando a locales y visitantes por igual.

T/RNV