Este viernes, 18 de julio, los venezolanos volverán a las calles de Caracas en una marcha para exigir la liberación de los niños secuestrados y en defensa de la Patria. La concentración comenzará a la 1:00 p.m. en Chacaíto, específicamente en la esfinge de José Martí, y avanzará hasta la sede del Nuncio Apostólico, según informó el jefe de Gobierno de Caracas, Nahúm Fernández, a través de Telegram.
Fernández hizo un llamado a la unidad del pueblo, afirmando: “Con firmeza y esperanza, exigimos el regreso de nuestros niños y niñas, víctimas del secuestro imperial. ¡Vamos todos! Porque cuando el pueblo se une, no hay poder que lo detenga”. Además, recalcó que “el pueblo no olvida ni se arrodilla”, reafirmando la determinación de los manifestantes.
Esta movilización se da después de que el presidente Nicolás Maduro entregara una carta al Nuncio Apostólico en Venezuela, solicitando al Papa León XIV su apoyo como autoridad moral para lograr la liberación de los menores venezolanos retenidos en Estados Unidos. Maduro destacó la importancia de la intervención del Vaticano en esta causa humanitaria.
El mandatario también mencionó que, tras el envío de la carta, se han observado gestos positivos por parte de la Iglesia Católica en favor de la liberación no solo de los niños, sino también de 252 migrantes venezolanos detenidos en El Salvador. Esto refuerza la esperanza de una pronta resolución a estas situaciones.
La marcha de este viernes refleja la resistencia y solidaridad del pueblo venezolano, que sigue alzando su voz ante lo que considera injusticias internacionales. La convocatoria busca mantener la presión para lograr el retorno de los niños y reafirmar la soberanía nacional.
Con consignas de unidad y lucha, los manifestantes recorrerán las calles de Caracas, recordando al mundo que Venezuela no claudica en su defensa por los derechos de sus ciudadanos, especialmente los más vulnerables. La movilización promete ser un acto masivo de reclamo y esperanza.
T/RNV