La Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela dictó sentencia en el expediente 25-196, bajo el número 129, en la que ordena una medida preventiva para la reunificación familiar inmediata de la niña Maikelys Antonella Espinoza Bernal, retenida sin su progenitora en Estados Unidos.
La decisión se fundamenta en la prioridad absoluta del interés superior del niño, el derecho a ser criada por su
familia de origen, a la lactancia materna, la relación materno filial y la obtención de documentos de identificación.
La sentencia establece que el retiro forzoso de la niña por parte de las autoridades estadounidenses ocurrió de
manera “arbitraria y abusiva sin tomar en consideración su interés superior”, lo que genera un “trauma psico-biosocial en su desarrollo efectivo y sano”.
Ante ello, la Sala de Casación Socisl del TSJ se declaró «competente para conocer la causa de la niña (…) la cual se encuentra retenida ilegalmente sin su familia en los Estados Unidos de América» y ordenó medidas urgentes en favor de la niña.
Entre las disposiciones esenciales, el TSJ decretó la reunificación de la niña con su madre, Yorely Escarleth Bernal
Inciarte, quien permanece en territorio venezolano. Asimismo, se otorgó la custodia a la progenitora, destacando
que esta es un atributo inherente a la patria potestad.
Además, se ordenó el retorno inmediato de la niña a Venezuela de manera “segura y sana”, instruyendo a las
autoridades nacionales a activar mecanismos legales, diplomáticos y multilaterales para garantizar el cumplimiento de la medida.
El TSJ ordenó notificar al Ministerio Público, a la Oficina de Relaciones Consulares para recurrir a todos los
mecanismos legales, politicos, diplomáticos y de acciones multilaterales, a fin que se respete la sagrada integridad
de la familia venezolana.
Igualmente, a la Procuraduría General de la República, instando a tomar acciones internacionales para la restitución de la niña.
El fallo reafirma el compromiso de Venezuela con la Convención sobre los Derechos del Niño y los tratados
internacionales que garantizan su protección en casos de separación forzada.
La medida busca salvaguardar la integridad y estabilidad emocional de la niña, asegurando su regreso al seno
materno.
T/AVN