Venezuela manifiesta su preocupación por el agravamiento de la crisis en Ucrania. Seguimos de cerca los acontecimientos en la región del Donbass, que también son el resultado de casi una década de violaciones a los derechos humanos de su población.
Lamentamos constatar que la escalada actual, con la penosa y terrible pérdida de vidas que ha supuesto, se origina en el quebrantamiento de los Acuerdos de Minsk bajo el incentivo de los Estados Unidos de América. La expansión permanente de la OTAN hacia el este de Europa, conjugada con una progresiva actitud hostil hacia Rusia y su integridad territorial, añadieron amenazas insoslayables.
Por ello, Venezuela siempre ha condenado la perversa tendencia hacia visiones unilaterales y hegemónicas del mundo, que desconocen los principios de la diplomacia, organizan invasiones con total impunidad en países como Siria, Irak o Afganistán y promueven escudos mediáticos que limitan la libertad de expresión y manipulan opiniones y emociones para incrementar la xenofobia y el discurso de odio.
Rechazamos las medidas coercitivas unilaterales y de retaliación económica, comercial o financiera, contra la Federación de Rusia, que intensificarán la crisis, menoscabando el disfrute de los derechos humanos de su pueblo y de muchos otros sectores sociales de los mismos países que originan esas ilegales “sanciones” que, sin saberlo aún, también serán afectados por las consecuencias secundarias de tales medidas.
Se continúa vulnerando el Derecho Internacional con medidas coercitivas unilaterales que constituyen una nueva modalidad de guerra que reedita, mediante la congelación de activos y cuentas bancarias de países, la actitud criminal de los filibusteros de siglos pasados, más preocupados por robar oro que por salvar vidas.
También nos avergüenza que en ésta, la casa común de los derechos humanos de Naciones Unidas, se ejercite una euforia de intolerancia contra la Federación de Rusia o cualquier otro país. No podemos ni debemos, por responsabilidad histórica, hacerle juego al aquelarre mediático occidental animado por los mismos responsables de la actual crisis que vive Ucrania. Como dijo el Libertador Simón Bolívar: “la confianza ha de darnos la paz. No basta la buena fe, es preciso mostrarla”.
Señor Presidente,
Venezuela, que es contraria a la guerra, y firme defensora de los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas y las normas del derecho internacional, hace un llamado a retomar el diálogo efectivo entre las Partes en aras de preservar la vida, los derechos humanos de los habitantes de estos países y la paz y la estabilidad de la región.
Con base en nuestra Diplomacia Bolivariana de Paz, llamamos a evitar toda escalada y al cese de la propaganda de guerra que incluso justifica el envío de armas a ciudadanos civiles; al discurso de la intolerancia; y reiteramos que sólo a través de la diplomacia, del diálogo y la contención, sin presiones ni sanciones, podremos avanzar en la resolución pacífica del conflicto.
Muchas gracias.
T/Cancillería
