De forma drástica e inesperada, la pandemia ha impuesto nuevas normas de vida para millones de personas en todo el mundo. De la propia enfermedad aún no se sabe todo con exactitud, mientras aparecen constantemente nuevos datos y cifras sobre la letalidad del virus que impactan.
Millones de personas en decenas de países se ven obligados a adaptarse a las condiciones de la cuarentena y de autoaislamiento. Unos lo afrontan en soledad, mientras que otros intentan trabajar desde casa rodeados de una familia numerosa. Todos estos factores en su conjunto son motivo de nerviosismo, preocupación e incluso de ataques de ansiedad para muchos.
Preocuparse es normal
Según la psicóloga Elena Novosiólova, integrante la Liga de psicoterapia rusa, en estos momentos uno debe recordar que el miedo y la preocupación son sentimientos gracias a los cuales la humanidad consiguió sobrevivir. «Son las reacciones de protección ante cualquier tipo de cambios en el medio ambiente», explica.
«Teniendo en cuenta todos los cambios, que supuso la pandemia de coronavirus para la gente, la preocupación es lo más normal que le puede pasar a uno en estos momentos», dice la experta en relaciones familiares, autora de libros sobre el entendimiento mutuo.
Sin embargo, la psicóloga recomienda a cada persona permanecer atenta a su estado moral. «Si Usted se da cuenta de que la tensión no se va durante unos 5-7 días, si le tiemblan las manos, si tiene insomnio, no puede concentrarse, sin duda tiene que solicitar ayuda médica», precisa.
Trucos contra el pánico
Para calmar la mente y acercarse a la anhelada tranquilidad, la especialista recomienda hacer cualquier tipo de ejercicio físico: sentadillas, estiramiento, etc. «Si tiene jardín o patio, puede dar ahí algunas vueltas. También a veces ayuda, sencillamente, tomar una ducha», cuenta Novosiólova.
Otra opción, según la experta, es «volcar» sus emociones sobre el papel, o sea formular las causas de su preocupación de forma escrita. «Esto ayuda a rebajar el grado de tensión. Además, así uno no contagiará a los demás con el ‘virus de miedo’, que en estos momentos se divulga debido a la gran cantidad de información alarmante», comenta.
Autoaislamiento familiar
En lo que se refiere al régimen de la cuarentena, cuando familias enteras se ven obligadas a permanecer aisladas en sus casas, la psicóloga recomienda tomar medidas preventivas antes de que «estalle la bomba». «Hay que establecer las reglas y llegar a un acuerdo, antes de que todo el mundo riña. Lo mejor es que cada uno disponga de un par de horas en las que nadie le moleste», añade.
Además, insiste en que no hay que seguir las viejas costumbres, ya que los tiempos del coronavirus dictan unas nuevas condiciones de coexistencia. «Nuevas condiciones, nuevas acciones, nuevas costumbres. Siguiendo este lema, las familias evitarán los divorcios», afirma Novosiólova.
Un bueno libro
La experta explica que el miedo a contagiarse con el coronavirus se debe al hecho de que se trata de una enfermedad nueva. «Los especialistas aún lo están estudiando. No hay información completa y precisa. Cualquier incógnita nos asusta mucho. Y este virus es nuevo y poco conocido», recuerda la psicóloga.
Novosiólova considera imprescindible valorar la información que ofrecen los medios de comunicación según su utilidad. «Cuando hablan, por ejemplo, de los medios de protección contra el contagio, sin duda es útil. Pero cuando, obviamente, dramatizan la situación y cuentan algo que tiene como objetivo horrorizar al público, es mejor optar porleer un buen libro o escuchar música», explica.
T/RT