Más de 120 mil millones de dólares en pérdidas registra Venezuela desde 2014 con la imposición de medidas unilaterales y coercitivas por parte del gobierno de Estados Unidos, que ha aplicado más de 300 medidas para menoscabar y poner en riesgo los derechos fundamentales del pueblo venezolano, sentenció este martes el canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza.
Durante su intervención en el segmento de alto nivel de la ONU, que se realiza en Ginebra, Suiza, el diplomático venezolano explicó que la economía venezolana sufrió una abrupta disminución del 90% del ingreso petrolero, que pasó de 42 mil millones de dólares en 2013 a 4 mil millones en el año 2018.
Al respecto, Arreaza hizo mención al informe presentado por los economistas norteamericanos Jeffrey Sachs y Mark Weisbrot, quienes afirmaron que «las sanciones de Estados Unidos representan una sentencia de muerte para decenas de miles de venezolanos al año, hecho que fue ratificado por la alta comisionada Michelle Bachelet; el Relator Especial para Medidas Coercitivas del Consejo de DDHH y el experto independiente, Alfred de Zayas.
Es por ello, que el Canciller venezolano aseguró que la imposición de medidas coercitivas y unilaterales a países soberanos, debe ser considerada una causal suficiente para que un Estado miembro no forme parte del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
A juicio de Arreaza, aquellos gobiernos que aplicación medidas ilegales que afectan la estabilidad económica, política y social de los pueblos actúan al margen de los preceptos del derecho internacional y la Carta de Naciones Unidas.
«Venezuela considera que los gobiernos que impongan, apoyen o faciliten la implementación de medidas coercitivas unilaterales no deben formar parte de este Consejo», sentenció Arreaza.
A pesar del contundente rechazo del Consejo de Derechos Humanos a la aplicación de medidas coercitivas, las cuales generan efectos devastadores y costos humanos desproporcionados, gobiernos como el de Estados Unidos privan a los pueblos de gozar sus derechos fundamentales pretendiendo imponer su modelo político y económico, basados en los cambios de gobierno por la vía de facto.
«El gobierno de los Estados Unidos y otros gobiernos que deciden acompañarle continúan implementando medidas coercitivas unilaterales bajo criterios ideologizados (…) pretenden imponer su modelo político y económico con estrategias de cambio de régimen por la fuerza, utilizando como herramienta, estas medidas perversas, totalmente al margen del Derecho Internacional, para disponer de los recursos naturales de los países afectados», manifestó.
Ante las reiteradas denuncias que viene realizando el gobierno de Venezuela al Consejo de Derechos Humanos, que a juicio de Arreaza «poco o nada ha hecho Naciones Unidas» para contener el daño de estas medidas, recordó que en días pasados el gobierno de Venezuela interpuso una demanda ante la Corte Penal Internacional para solicitar el inicio de una investigación que determine las devastadoras consecuencias de las medidas unilaterales en contra del pueblo venezolano implementadas por el gobierno de Donald Trump.
«Naciones Unidas y, en particular, este Consejo, debe defender el derecho que tiene el pueblo venezolano, como el pueblo iraní, o el pueblo cubano, o el pueblo coreano, o varios pueblos africanos, el Sur, en fin, de disponer de sus propios recursos para satisfacer sus propias necesidades sociales, con el sistema político que soberanamente decidan darse», señaló.
A pesar de los constantes ataques imperiales, el gobierno de Venezuela, a través del canciller Jorge Arreaza, ratificó su compromiso de seguir promoviendo los derechos fundamentales, así como las iniciativas contra la discriminación racial, la xenofobia y demás intolerancia conexas.
T/AVN