El ozono no solo está presente en la atmósfera para depurar el aire y filtrar los rayos ultravioletas provenientes del Sol. En la superficie terrestre, esta sustancia sirve para desinfectar el agua sin afectar su grado de acidez (pH) ni alterar su coloración.
Cuando reacciona con proteínas y lípidos, el ozono se transforma en un potente oxidante, es decir, es capaz de oxidar a otras sustancias similares al oxígeno.
Pero el ozono tiene un tiempo de vida extremadamente corto, por lo que a temperatura ambiente vuelve a su estado original de tres moléculas de oxígeno (O3).
Es aquí donde el aceite vegetal juega una importante función, pues al ser mezclado con el ozono cambia la estructura química del mismo, de manera que pueda ser almacenado de forma estable y activa por varios años.
El Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic) diseñó un prototipo de planta para la producción de aceite vegetal ozonizado de alta calidad y a gran escala, destinado a cubrir la demanda del sector salud nacional (público y privado), con proyección al mercado internacional.
El proyecto es liderado por Ángela Sifontes, jefa del Laboratorio de Plasma Química y Nanomateriales del Centro de Química del Ivic, en alianza estratégica con la empresa Phoenix Ozono, ubicada en el estado Aragua.
De acuerdo con la investigadora del Ivic, la compañía ha donado diversos equipos para hacer investigación, tales como concentradores de oxígeno, generadores de ozono y sistemas de bujías con tamices moleculares.
“No solo estamos trabajando en la preparación del aceite ozonizado sino en lograr que este pueda ser escalado, para no depender de un producto importado sino que todo el desarrollo sea made in Venezuela”, informó Sifontes.
La experta igualmente aseguró que el Ivic ofrecerá el soporte analítico y microbiológico para garantizar la calidad del aceite ozonizado.
Los compuestos que se forman al ozonizar el aceite vegetal son ozónidos, peróxidos y aldehídos, siendo los tres sustancias con propiedades germicidas.
También son inmuno-estimulantes y reparadores de tejidos, por lo que son recetados para tratar infecciones dérmicas, lesiones traumáticas, heridas infectadas, úlceras, escaras, infecciones por hongos, picaduras de insectos, quemaduras, entre otras enfermedades.
“Para elaborar aceites vegetales ozonizados se requiere aceite vegetal. Estamos trabajando actualmente en el procesamiento de nuestro aceite vegetal prensado al frío, evaluando las características. Además, hemos seleccionado las moléculas que nos interesan, tratado selectivamente para darle una funcionalidad y actividad más fuerte de lo que se consigue comercialmente”, precisó Sifontes.
Las primeras patentes internacionales de aceites vegetales ozonizados datan de hace más de 40 años.
Son 100% orgánicos, no requieren aditivos especiales como preservantes, estabilizantes o colorantes, y en aplicación tópica se activan con la temperatura corporal, liberando oxígeno hacia la piel.
Según la experta del Ivic, hoy en día se comercializan cremas, ungüentos y cápsulas blandas, así como jabones antibacteriales, desodorantes y cremas dentales, empleando como base los activos de los aceites ozonizados.
Este proyecto fue presentado recientemente en la Feria Internacional de Ciencia y Tecnología (FICTEC 2018), organizada por el Ministerio del Poder Popular para Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología en el Parque Simón Bolívar de la Base Aérea Generalísimo Francisco de Miranda, La Carlota.
T/IVIC
