El Gobierno Nacional rechazó las declaraciones «injerencistas e impertinentes» del Departamento de Estado de Estados Unidos (EEUU) a través de su portavoz Robert Palladino, sobre la decisión soberana de aplicar protocolos ante la incursión de dos buques contratados por la transnacional ExxonMobil en aguas jurisdiccionales
En un comunicado difundido por la Cancillería se hace la observación de que los señalamientos son emitidos sin «reparar las normas del derecho internacional público», lo cual evidencia su intención de «promover intereses corporativos vinculados con la élite gobernante en Washigton».
Palladino, en un mensaje difundido en su cuenta de Twitter, instó a Venezuela a «respetar el derecho internacional y la soberanía de sus vecinos» y obvia que los buques de exploración se encontraban en aguas dentro de la proyección del Delta del Orinoco de Venezuela y no en una Zona Económica de Guyana.
Ante ello, la Cancillería de la República Bolivariana de Venezuela exhortó a las autoridades estadounidenses a «mantenerse al margen de las relaciones entre Estados soberanos y a ocuparse de sus asuntos internos».
El sábado 22 de diciembre, la Armada Nacional Bolivariana, en apego a los tratados internacionales, interceptó dos buques de exploración sísmica en aguas jurisdiccionales de Venezuela. En este sentido, la nación venezolana exigió a Guyana el respeto a su soberanía, al tiempo que instó a restablecer el diálogo directo con la autoridades venezolanas.
A continuación, el texto íntegro del comunicado:
«El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza categóricamente el comunicado injerencista e impertinente del Departamento de Estados de los EEUU sobre la acción soberana del día 22 de diciembre por parte de la Armada Nacional Bolivariana, en estricta protección de las aguas jurisdiccionales indiscutiblemente venezolanas.
Los buques de exploración petrolera contratados por fuera del marco legal internacional por la República Cooperativa de Guyana se encontraban en aguas dentro de la proyección del Delta del Orinoco de Venezuela, por lo que jamás podrían haberse localizado en una Zona Económica Exclusiva de Guyana.
Los buques abandonaron las aguas venezolanas luego de un intercambio de comunicaciones con la Armada Nacional Bolivariana, que se llevó a cabo en estricto apego a las normas internacionales y a la Diplomacia Bolivariana de Paz.
A todas luces es evidente que el gobierno de EEUU interfiere a conveniencia en un asunto que en lo absoluto es de su incumbencia, con el fin de promover intereses corporativos vinculados carnalmente con la élite gobernante en Washington, sin reparar en las más elementales normas del derecho internacional público. Hacemos un firme llamado a las autoridades estadounidenses a mantenerse al margen de las relaciones entre Estados soberanos y a ocuparse de sus asuntos y problemas internos.
Caracas, 25 de diciembre de 2018».