«No se puede contabilizar el sufrimiento humano» causado por el bloqueo, expresó este jueves el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, al calificar la medida ilegal, mantenida desde 1960, por Estados Unidos contra la isla como un acto de genocidio.
Durante su intervención en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en la que se someterá a votación el proyecto de resolución que pide el fin del cerco contra Cuba, citó el caso de Rosa Esther Navarro Ramírez, una niña cubana de un años y dos meses de edad, a quien padecía de un drenaje anómalo de venas pulmonares.
Rosita sufría una fribilación ventricular (latidos rápidos y desordenados) e hipertensión pulmonar, relató. Pese a no contar con el fármaco necesario para tratar su condición -oxido nítrico inhalado-, producido por una compañía estadounidense, la niña logró superar su condición de salud pese a la crueldad del bloqueo.
Rodríguez citó además la historia de una niña guantanamera de 13 años, con un tumor maligno de columna, y un niño habanero de 5 años, con una masa tumoral entre el tallo cerebral y el cerebelo, quienes no pudieron ser tratados con el fármaco prescrito para este tipo de caso, Temozolomida; aunque, asintió, felizmente pudieron superar la enfermedad.
“En el último año más de 30 compañías estadounidense rehusaron vender a la compañía Medicuba, medicamentos, insumos y equipos imprescindibles para el sistema de salud cubano”, destacó el Canciller cubano.
Resultado de esta medida ilegal impuesta al pueblo cubano desde el año 1960, en el año 2017 fallecieron 224 cubanos, por cada 100 mil habitantes, por no contar con los fármacos para el tratamiento del cáncer.
Escuche aquí la intervención del canciller de Cuba, Bruno Rodríguez
T/RNV WEB