Vitamina C: fuente, beneficios y dosis

vitaminaSegún los Institutos Nacionales de Salud las mejores fuentes dietéticas de vitamina C son las frutas y verduras tales como: melones, cítricos, kiwis, mangos, papayas, piñas, fresas, frambuesas, sandía, arándanos, pimientos rojos y verdes, espinaca, repollo, coliflor, nabos, tomates, patatas, brócoli, calabaza y coles de Bruselas.

Se aconseja que tanto las frutas como las verduras sean bio, de cultivos orgánicos y naturales y que antes de adquirirlas, el consumidor se asegure su origen comprobando que tienen el etiquetado correspondiente.

Beneficios

El cuerpo utiliza la vitamina C de muchas maneras diferentes. Una de las más conocidas es su participación en la formación del colágeno que es fundamental para la salud de la piel, tendones, ligamentos y vasos sanguíneos. También se utiliza esta vitamina para reparar y mantener los cartílago, huesos y dientes y para formar el tejido cicatricial.

La vitamina C es un antioxidante natural que ayuda a proteger las células de los daños causados por los radicales libres a los que estamos expuestos diariamente, como la contaminación del aire, el humo del cigarrillo y la luz ultravioleta del sol, según explica un estudio publicado recientemente por el Centro de Salud Saint John’s de Providence en Santa Mónica, California.

Muchas personas creen que la vitamina C cura una amplia gama de enfermedades, pero de entre aquellas propiedades que aún no han sido probadas destacamos la posibilidad de un menor riesgo de contraer ciertos tipos de cáncer, diabetes, degeneración macular relacionada con la edad y cataratas.

Sin embargo, un estudio del Instituto Nacional del Ojo encontró que una ingesta de 500 mg diarios de vitamina C, junto con suplementos de betacaroteno, vitamina E y zinc, retardó la progresión de la degeneración macular relacionada con la edad avanzada en un 25 %.

También ayudó a disminuir la pérdida de agudeza visual en un 19 por ciento, para aquellos pacientes que ya estaban en alto riesgo de desarrollar la enfermedad. Sin embargo, las vitaminas no tuvieron un efecto significativo en la aparición o progresión de las cataratas.

La comunidad médica está dividida en cuanto a los los beneficios de la vitamina C para el corazón. Algunos estudios sugieren que puede prevenir ataques cardíacos al ralentizar el endurecimiento de las arterias mediante la prevención del colesterol LDL (“malo”).

Otras investigaciones muestran que la vitamina C no previene los ataques cardíacos. Un estudio de Johns Hopkins encontró que la vitamina C tiene un efecto “modesto” en la reducción de la presión arterial alta y actualmente no sugiere suplementos de esta vitamina, como una opción de tratamiento.

La vitamina C se toma a menudo para prevenir o curar el resfriado común, aunque la investigación demuestra que la mayoría de las personas que toman altas dosis de vitamina C se resfrían con la misma frecuencia que aquellos que no las toman.

Lo que sí está comprobado es que la presencia de Vitamina C en dosis altas puede acortar la cantidad de tiempo que una persona está enferma y que puede intervenir en los procesos biológicos secundarios, disminuyendo la sintomatología y los efectos adversos.

Deficiencia y Dosis

La deficiencia de vitamina C es bastante común. Los fumadores son más propensos a una deficiencia de esta vitamina, de acuerdo con la Universidad de Maryland Medical Center. A menudo, los médicos sugieren un suplemento de vitamina C a estas personas para prevenir o curar una deficiencia.

No obtener suficiente cantidad de esta vitamina puede causar, gingivitis y sangrado de las encías, pelo seco y quebradizo, piel áspera, seca y escamosa, una disminución de la cicatrización de heridas, hemorragias nasales y baja en las defensas contra infecciones, de acuerdo con la Universidad de Maryland Medical Center.

La falta de vitamina C durante largos períodos de tiempo puede causar una enfermedad llamada escorbuto, un mal muy común entre los primeros navegantes; para prevenirlo siempre llevaban limones a bordo, que son los cítricos de mayor durabilidad. Los síntomas del escorbuto son: inflamaciones, sangrado de las encías, dolor en las articulaciones y mala cicatrización.

Se estima que el 40 por ciento de los hombres y el 38 por ciento de las mujeres en los países industrializados ingieren cantidades insuficientes de vitamina C, por lo que se recomienda que tanto las verduras como las frutas mencionadas, sean parte de la dieta diaria de cada persona.

La dosis diaria recomendada (RDA) para la vitamina C varía, dependiendo de la edad, el género y otros factores. Típicamente, el RDA es 75mg para las mujeres y 90mg para los hombres, según la Universidad de Oregón. Mujeres embarazadas y niños deben tomar de 80 mg a 120 mg, dependiendo de la edad.

Exceso

En general la ingesta de vitamina C no causa ningún tipo de problema por sobredosis ya que es soluble en agua, por lo que no es almacenada en el cuerpo; el exceso se filtra a nivel renal y se elimina con la orina.

Sin embargo, algunas personas que toman más de 2.000 mg podrían experimentar algunos trastornos gastrointestinales. Y aquellos que son propensos a formar cálculos renales deben consultar con su médico antes de tomar altas dosis de vitamina C.

 

 

T/Ecoticias