Los incidentes iniciaron alrededor de las 8 horas locales en el aeropuerto de la capital belga, hecho que generó el cierre inmediato de las instalaciones por medidas de seguridad. Posteriomente fueron detectados otros artefactos explosivos.
Posteriormente se reportaron otras cuatro explosiones en la estación de metro de Maalbeek, cerca de la sede de la Unión Europea. La línea de transporte fue suspendida temporalmente; así como las actividades escolares y el sistema de transporte público.
El presidente de la región, Rudi Vervoort, confirmó que los hechos son productos de ataques terrorista e informó la activación del nivel 4 de alerta antiterrorista, de un protocolo de emergencia, mientras se investigan los hechos.
Toda Europa está en estado de conmoción, los gobiernos de la región están evaluando la situación. Entre las primeras medidas está la suspensión temporal de servcios de transporte locales y el cierre de la frontera entre Bélgica y Francia.
Medios de comunicación locales y agencias asocian las explosiones con la detención de unas nueve personas relacionadas con los atentados de París, perpetrados en noviembre de 2015, entre ellos, el terrorista Salah Abdeslam, quien fue detenido el pasado viernes en Bruselas.
T/ Telesur/RT/RNV
