El Consejo Nacional de Reivindicación Marítima de Bolivia encabezado por el presidente Evo Morales se reunirá este jueves en La Paz para evaluar la agenda de trabajo que se trazará en marco al juicio por una salida soberana al mar planteado contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
El ministro boliviano de Exteriores, David Choquehuanca, anunció que la reunión se celebrará en La Paz con varios de sus colegas del Gobierno y con el agente ante la CIJ, el expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé (2005-2006), quien ya se encuentra trabajando en la evaluación del caso.
El canciller boliviano indicó que el «agente (boliviano) está en Santa Cruz, están trabajando estos días con exautoridades y van a informar sobre el trabajo que se está realizando con relación a la demanda marítima y este consejo tomará sus decisiones».
Choquehuanca agregó que el consejo definirá los próximos pasos que dará Bolivia ante el alto tribunal de Naciones Unidas, que el próximo 13 de septiembre reunirá a los agentes de ambos países para analizar los plazos procesales del juicio.
Hace unos días, el procurador general de Bolivia, Héctor Arce, adelantó que su país considera necesario plantear una segunda fase de alegatos escritos en el juicio, y expresó su deseo de que sea de mutuo acuerdo entre las dos naciones.
En 1825, Bolivia llegó a la vida independiente con una costa de aproximadamente 400 kilómetros sobre el océano Pacífico; 54 años después, en 1879, Chile invadió y ocupó por la fuerza el territorio del departamento de Litoral, desde entonces privó al país de un acceso soberano al mar y de un territorio de al menos 120 mil kilómetros cuadrados.
El Gobierno de Evo Morales presentó ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya (CIJ) en el 2013 una contramemoria «histórica, jurídica y política» por el caso del diferendo marítimo con Bolivia.
Chile, por su parte, objetó en 2014 la competencia de la CIJ para conocer la demanda marítima boliviana, y después de 14 meses, ese tribunal internacional rechazó ese recurso interpuesto por La Moneda.
En marzo de 2016, Morales anunció que Bolivia acudiría a La Haya nuevamente, pero esta vez para demandar a Chile por el aprovechamiento ilegal de las aguas del Silala, una fuente de agua que se origina en el departamento de Potosí, en el sureste de Bolivia, a cuatro kilómetros de la frontera con Chile, país que canalizó artificialmente (desde 1908) el curso del agua para abastecer a sus ciudades del norte.
T/Telesur