Este lunes inició una gran jornada masiva comunicacional en defensa del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, y de la soberanía nacional. Así lo anunciaron el ministro del Poder Popular para la Comunicación e Información, Freddy Ñáñez, el viceministro de Gestión Comunicacional, Simón Arrechider, y el viceministro de Comunicación e Información, Johannyl Rodríguez Rivero, en respuesta a las recientes agresiones del gobierno de Estados Unidos contra el jefe de Estado y otras autoridades legítimas de Venezuela.
El objetivo de estas acciones es desmentir las falsas narrativas impulsadas por el imperialismo y expresar la indignación del pueblo venezolano ante estos ataques, que se han intensificado en los últimos años como parte de una ofensiva planificada para imponer, desde el exterior y por la fuerza, un guion de criminalización que busca desconocer la voluntad democrática de los venezolanos.
Bajo la consigna #RespaldoTotalAMaduro y el sistema de comunicación calles, medios, redes, paredes y radio bemba, los venezolanos cierran filas con el presidente Nicolás Maduro, reinvidicando su lucha y sus victorias a pesar de las amenazas externas. Al respecto, el ministro Ñáñez, recordó que Venezuela está viviendo una etapa de grandes definiciones y triunfos, como el ocurrido el 28 de julio de 2024, donde se concretó el apoyo al presidente Nicolás Maduro y se consolidó el plan de las 7 Transformaciones (7T) para el período 2025-2031.
En un contexto geopolítico marcado por conflictos globales y potencias en disputa, el gobierno estadounidense —sumido en crisis internas, escándalos de corrupción y desprestigio— intenta reposicionar a Venezuela como una «amenaza» para distraer la atención de sus propias debilidades. Es la misma estrategia imperialista aplicada contra otras naciones: crear enemigos ficticios, manipular la opinión pública y justificar sanciones, aislamiento e incluso intervenciones.
Los intentos de dominación tienen hoy en día como eje central el control de la producción, circulación y consumo de símbolos, narrativas y significados. Este mecanismo opera mediante la colonización del espacio mediático, donde se posicionan los intereses hegemónicos. Esta dinámica se inscribe en la guerra cognitiva, componente clave de las guerras híbridas contemporáneas. Su objetivo no es únicamente la desinformación, sino la reconfiguración de los marcos interpretativos de la realidad. Así, acciones políticas como sanciones, bloqueos o recompensas se naturalizan, en lugar de reconocerse como instrumentos de coerción imperial.
Es en este marco que radica la gran importancia de la convocotaria de jornada comunicacional masiva que comienza hoy, como una muestra activa de unidad, conciencia y fuerza popular frente a quienes pretenden quebrar el espíritu de la patria. No se trata solo de un acto comunicacional: es la voz colectiva de un pueblo que defiende su derecho a decidir su destino. Cada mensaje, imagen y palabra compartida se convierte en un escudo de dignidad contra la mentira y en un arma para proteger nuestra soberanía.
Finalmente, el ministro Ñáñez hizo un llamado a la unión de todos los sectores de la nación y a la claridad estratégica ante los desafíos que enfrenta no solo Venezuela, sino también los pueblos que resisten a las élites estadounidenses. Advirtió que, en su desesperación y debilidad, el imperialismo se vuelve cada vez más peligroso.
Venezuela ha resistido bloqueos, agresiones y mentiras, y lo seguirá haciendo con la misma firmeza y dignidad que la caracterizan. #RespaldoTotalAMaduro no es un simple eslogan: es la expresión de un pueblo que ve en su presidente a un líder valiente, comprometido con la paz, la vida y la autodeterminación de la patria.
T/RNV