Hoy 6 de agosto es un día de júbilo no laborable en el estado Táchira, en conmemoración de los 415 años del Santo Cristo de La Grita, una de las imágenes religiosas más veneradas de la región. Así lo decretó el gobernador Freddy Bernal, permitiendo que miles de feligreses participen en las festividades en honor al «Santo del Rostro Sereno», patrono del estado.
Cada año, devotos de todo el país se desplazan hacia La Grita, conocida como la «Ciudad del Espíritu Santo», para rendir homenaje al milagroso Cristo. Las calles se llenan de peregrinos que, con profunda devoción, caminan hacia la basílica del Santo Cristo, demostrando su fe en una de las tradiciones religiosas más arraigadas de Venezuela.
De acuerdo con la Gaceta Oficial del estado Táchira, las autoridades locales, incluyendo la policía regional y Protección Civil, deben garantizar la seguridad y atención de los miles de fieles que realizan la caminata hacia la capital del municipio Jáuregui. El objetivo es prevenir incidentes y brindar apoyo durante esta masiva manifestación de fe.
Además de su importancia religiosa, La Grita celebra este 5 de agosto 449 años de fundación. Reconocida como la «Atenas del Táchira» por su riqueza cultural, la ciudad ha evolucionado hacia un modelo de ciudad inteligente y sostenible, según destacó el alcalde Juan Carlos Escalante.
El municipio Jáuregui combina su tradición agrícola con avances tecnológicos, impulsando un desarrollo equilibrado. Escalante resaltó que La Grita no solo es un símbolo de fe, sino también un ejemplo de innovación y crecimiento en el occidente del país.
La festividad del Santo Cristo de La Grita trasciende lo religioso, convirtiéndose en un evento que refuerza la identidad cultural tachirense. Con calles adornadas, ferias artesanales y actividades culturales, la ciudad se viste de gala para recibir a visitantes nacionales e internacionales.
En un mundo acelerado, esta celebración invita a la pausa espiritual, recordando la importancia de la fe y la tradición. El 6 de agosto no solo será un día festivo, sino una oportunidad para honrar una devoción que ha marcado generaciones en el Táchira.
T/RNV
