El 19° Festival Mundial de Poesía de Venezuela (2025) continúa demostrando que la poesía no solo es arte, sino también un acto político y de resistencia. La cuarta gala, celebrada en la Sala José Félix Ribas del Teatro Teresa Carreño, se convirtió en un espacio donde la palabra se alzó como trinchera para honrar la lucha palestina, denunciar las injusticias globales y tejer redes de solidaridad entre pueblos.
Más de diez poetas de diferentes nacionalidades compartieron versos que resonaron como himnos de lucha, recordando que la poesía puede ser un refugio y un arma. Joel Rojas, poeta venezolano, destacó que el festival «rinde homenaje a la resistencia, al amor y a la lucha incesante del pueblo palestino», criticando el colonialismo como «una lógica incorregible y suicida».
Por su parte, María Alejandra Rendón, también venezolana, enfatizó la importancia de estos espacios para la denuncia y la crítica: «Nosotros tenemos que formar parte de ese gran contingente de denuncias que hoy siente una indignación enorme porque el Estado de Derecho Internacional ha sido completamente destruido».
La gala reunió emociones profundas, como los versos del azerbaiyano Mahir Qarayev, quien recitó: «Hay un dolor en mi alma, temo a los hombres con hachas / que construyen horcas en este mundo. / Los árboles como hermanos desde siempre / en los bosques de todos los países».
Estos poemas no solo evocaron el dolor de la opresión, sino también la esperanza en la unidad de los pueblos.
El evento, que se extenderá hasta el 20 de julio, incluirá:
– Recitales poéticos
– Presentaciones de libros
– Conversatorios y talleres
– Foros académicos
Este festival reafirma que la poesía es un acto de resistencia, un llamado a la empatía y a la acción, demostrando que las palabras, cuando se comparten, pueden cambiar el mundo.
T/RNV