Tres cartas personales enviadas a los mandatarios de Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump, de la República Popular China, Xi Jinping, y de la Federación Rusa, Vladimir Putin, entregó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, para incentivar la iniciativa de una cumbre de paz mundial que desactive la amenaza de una guerra nuclear en el Medio Oriente.
“Esta idea, surgida de las profundidades del pueblo venezolano, expresa nuestra doctrina de la Diplomacia Bolivariana de Paz y del equilibrio del mundo, con respeto a la ley internacional y a la restitución del derecho internacional”, informó durante el segmentoZona Digital de su programa semanal ConMaduro+.
“La paz la hacemos entre todos o no habrá paz, agrego yo”, dijo el jefe de Estado, al dar lectura al texto de las misivas enviadas, tanto a los presidentes de las potencias mundiales como a los gobiernos de diversos países del planeta, además del Cuerpo Diplomático acreditado en Venezuela.
El mandatario venezolano resaltó que, desde Caracas, territorio libre y Bolivariano de América, se envía la iniciativa de crear una zona libre de armas nucleares en Asia y el desarme de las armas atómicas en poder del régimen sionista de Israel.
Venezuela reafirma compromiso con la Diplomacia Bolivariana de Paz
“Nadie nos sacará de nuestro pregón de Diplomacia de Paz. Tenemos una voz y una moral, tenemos a Bolívar, Chávez, Guaicaipuro y al Negro Primero, y nosotros somos ellos, y nada ni nadie nos sacará de esta posición, no somos esclavos ni arrastrados de ningún imperio, vamos a sostener la necesidad de una paz justa”, aseveró el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, al reiterar su posición firme en defensa de la paz, sin ceder ante presiones de potencias extranjeras.
El jefe de Estado reafirmó su compromiso con la paz mundial, además de destacar la urgencia de alcanzar un alto al fuego en Medio Oriente y exigir el desarme nuclear del Estado de Israel, al que calificó como una amenaza directa a la estabilidad de la región. “Ha llegado la hora de la paz, tienen que sonar las campanas de la paz y no los tambores de la guerra”, expresó.
El mandatario nacional condenó enérgicamente la política guerrerista del Gobierno de Benjamín Netanyahu, al que responsabilizó por el genocidio contra el pueblo palestino y por fomentar un conflicto de escala regional, y agregó que, de continuar la guerra, el primer ministro Netanyahu podría empezar a lanzar bombas nucleares contra Irán. “Lo estamos diciendo un 23 de junio del año 2025”.
También evocó la historia de la Revolución Islámica de Irán, al recordar su origen en 1979 junto a la Revolución Sandinista, y denunció los intentos históricos por destruirla, como la guerra impulsada por Irak con apoyo de Estados Unidos (EE. UU.) y la OTAN. “La República Islámica tuvo un millón de mártires y combatió con resistencia al aparato militar más poderoso del mundo”, señaló.
En cuanto al conflicto entre Palestina e Israel, subrayó que “el Estado sionista fue creado por el antiguo imperio británico y aprobado por la ONU en 1946, despojando a Palestina de su territorio y su paz”. A su vez, afirmó que Israel mantiene un proyecto de colonización y supremacismo que busca dominar Asia Occidental y sus recursos energéticos.
Finalmente, advirtió sobre el riesgo de una escalada bélica de consecuencias catastróficas. “Si la guerra sigue, podría terminar en un conflicto de alto nivel destructivo, incluso nuclear», alertó.
T/VTV