El presidente de la República, Nicolás Maduro, rechazó este martes el carácter discriminatorio y de exclusión aplicado por el gobierno de los Estados Unidos, al negar la participación oficial de Venezuela, Cuba y Nicaragua en la Cumbre de Las Américas, prevista para el próximo mes de junio en la ciudad de Los Ángeles.

A este respecto, aseguró que la Cumbre de las Américas se convirtió en “la cumbre de la protesta contra la exclusión antiimperialista”.

“Se nos pretende excluir porque le tienen miedo a la voz de los bolivarianos, no quieren que llegue la voz de Bolívar y de Chávez”, denunció el Jefe del Estado venezolano durante su participación en la clausura del coloquio internacional conmemorativo del bicentenario de la Batalla de Pichincha, realizado en el Teatro Municipal de Caracas.

«Desde Venezuela le decimos a los pueblos suramericanos: Los tiempos grandes de unión están frente a nosotros», enfatizó.

Exclusión injusta

Reiteró que se trata de una “exclusión injusta, totalmente injustificada, discriminatoria” en la que se demuestra el rol discriminador imperialista “contra los pueblos que luchamos por nuestras ideas”.

Afirmó que la posición discriminatoria e injustificada del gobierno de los Estados Unidos ha generado una gran protesta por parte de más de 25 gobiernos de América Latina y el Caribe, por este intento de Washington de excluir a tres países soberanos, tras alegar que son antidemocráticos.

“A estas alturas, hagan lo que hagan en Washington, la voz de Venezuela, Cuba y Nicaragua, llegará a Los Ángeles, en las grandes protestas de Los Ángeles. Nuestra voz estará presente en la cumbre, diga lo que diga el Gobierno de Estados Unidos”, aseguró.

En este contexto, el Presidente Maduro agradeció a los primeros ministros de las islas del Caribe y a sus homólogos Luis Arce de Bolivia, Alberto Fernández de Argentina y  particularmente a Andrés Manuel López Obrador presidente de México por “su valentía, solidaridad y apoyo” a la inclusión de Venezuela en la Cumbre de las Américas.

“Señores imperialistas: no han podido ni podrán con nosotros jamás. No han podido excluirnos. Sorpresas habrán. Voy comprando mi pasaje. Voy a llegar a pie a una gran marcha a Los Ángeles”, señaló.

En este sentido, insistió en que ante el momento que vive la Humanidad, debe prevalecer en la región “unión, diversidad, democracia, el derecho de todos los pueblos a manifestar sus propias opiniones”, destacando el rol preponderante que debe jugar la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en este esfuerzo.

Auguró que aunque el proyecto de la Unión de Naciones Suramericanas, Unasur, fue golpeado por la derecha, “más temprano que tarde se retomará y resurgirá como el ave fénix”.

Bicentenario de la Batalla de Pichincha

En el coloquio sobre la Batalla de Pichincha más de 40 historiadores de México, Cuba, Colombia, República Dominicana y Venezuela, debatieron sobre la importancia de este hecho histórico para sellar la independencia de Ecuador.

Los tres principales temas del coloquio tuvieron que ver con la unión de nuestra américa, las luchas anticolonialistas y antiimperialistas, y el ciclo bicentenario de independencia.

Al respecto, Maduro mencionó que esta batalla y la campaña del Sur fueron planificadas y diseñadas por el Libertador Simón Bolívar con miras a la consolidación “de una gran nación de repúblicas”, que se concretó con el nacimiento de la Gran Colombia.

“Tenemos la conciencia histórica de que somos parte de un proceso de más de quinientos años de resistencia; y si algo sabemos bien hoy es que somos parte de algo mucho más grande a nivel individual. Somos parte de la Patria Grande, la patria suramericana, caribeña, que hoy celebra un día de gloria”, recalcó.

Gesta emancipadora

El 24 de mayo de 1822, Sucre y el ejército Libertador enfrentan y derrotan a los soldados imperialistas, dirigidos por el militar Melchor Aymerich.

La batalla selló la independencia del departamento de Quito, anteriormente llamado Real Audiencia de Quito, del reino de España, por lo que impulsó a su vez la independencia del territorio actualmente conocido como la República de Ecuador.

Manifiesto por la autodeterminación

En el manifiesto final del coloquio, los 40 historiadores participantes exigieron el respeto a la autodeterminación de los pueblos y rechazaron el uso de la guerra como instrumento usado históricamente por los imperios para imponer sus criterios e intereses a los países que no se doblegan.

Rechazaron la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de los países y condenaron las “permanentes agresiones” de Washington contra Venezuela, Nicaragua, Cuba, Irán, Siria y Rusia.

“Defendemos a la Revolución Bolivariana como proyecto político irreversible. Reivindicamos la bandera e paz y el diálogo como el único instrumento para vivir en paz”, señala parte del manifiesto.

 

T/RNV Web