Periodista británico: «Un bonito día en Sebastopol de hace 12 años vi lo que se avecinaba y por eso no me uno al carnaval de hipocresía» de Occidente

Consecuencias del conflicto en Járkov, Ucrania, el 1 de marzo de 2022.

Si los llamamientos de algunos «locos» en el Reino Unido a favor de establecer una zona de exclusión aérea en Ucrania se concreta, ello desembocará en una guerra a gran escala en Europa, advierte el reconocido periodista británico Peter Hitchens en un artículo publicado en Daily Mail bajo el título ‘Un bonito día en Sebastopol de hace 12 años vi lo que se avecinaba y por eso no me uno a este carnaval de hipocresía’.

«He escuchado a un respetado parlamentario pedir la deportación de todos los rusos de este país (Reino Unido). He oído a locos solicitar una ‘zona de exclusión aérea’ en Ucrania. Si se salen con la suya, inmediatamente estallará una terrible guerra europea. Temo que ni siquiera saben lo que están pidiendo», se lamenta Hitchens, que en su día fue corresponsal de diferentes medios en Rusia y EE.UU.

El periodista insta a los políticos occidentales a terminar con este «carnaval de hipocresía«, en el que rechaza participar, porque dice saber «demasiado» sobre los antecedentes del actual conflicto ruso-ucraniano.

¿Es la OTAN una alianza pacífica?

«Sé que la política de expansión de la OTAN, que había prometido no hacerlo porque sabíamos que enfurecía a Moscú, desempeñó un papel en el desencadenamiento de esta crisis», señala. «Sé que el actual Gobierno ucraniano, ahora tratado como si fuera casi un santo, nació en 2014 como resultado de un golpe de Estado abiertamente respaldado por EE.UU.«, recuerda Hitchens.

«Sé que el muy admirado presidente Vladímir Zelenski cerró en febrero de 2021 tres canales de televisión de la oposición» por supuestos motivos de ‘seguridad nacional’, así como también ordenó el arresto de algunos políticos opositores, continua. «Sé que desde 2014, el Ejercito ucraniano ha usado fuerza brutal contra los civiles» en el este del país, subraya.

Paralelamente, el periodista critica la política belicista del Reino Unido y EE.UU. y asegura estar «cansado» de escuchar afirmaciones de que «la OTAN es una alianza pacífica». En este sentido, recuerda que en 1999 esa alianza militar bombardeó a Serbia, «matando civiles, cuando Belgrado no había atacado a ningún» aliado de la Alianza Atlántica. «Tampoco recuerdo a Libia atacando a un miembro de la OTAN antes de que esta alianza ‘defensiva’ lanzara la guerra aérea en Trípoli, que también mató civiles, niños incluidos, y convirtió a ese país en una caldera de caos», lamenta.

Por otra parte, también menciona que los propios países occidentales empujaron a Kiev a una confrontación con Rusia que, «como era de esperar» provocó el inicio de la operación militar. Hitchens relata que en 2010 visitó la ciudad de Sebastopol, en la península Crimea, y la región de Donbass, y que ya entonces vio venir «grandes problemas» para Ucrania.

«Un rígido Estado nacionalista étnico»

«En un país repleto de personas de etnia rusa, estaban tratando de hacer del ruso un idioma de segunda clase. Los rusos que habían vivido felices allí durante décadas estaban siendo presionados para que adoptaran la ciudadanía ucraniana y adoptaran versiones ucranianas de sus nombres de pila», escribe.

«En las escuelas estaban promoviendo» al colaborador nazi Stepán Bandera como «un héroe nacional», a quien los rusos «consideraban un terrorista«, recuerda. Además, «estaban enseñando historia que a menudo tenía un matiz antirruso«. «Muchas personas me dijeron sentirse molestas por esas políticas», relata el periodista.

Poco después de ese viaje, Hitchens dice que escribió un artículo, en el que indicó que la gente de Crimea y Donbass deseaban «un futuro ruso«. «Pensé que si Ucrania quería ser un rígido Estado nacionalista étnico, entonces necesitaría algún tipo de acuerdo pacífico con su minoría rusa. Poco sabía yo qué pasiones había tocado entonces», escribe.

T/RT